"El peón de González fue el entregador". Este fue uno de los argumentos de la defensa de Mosquito Juárez al apelar la sentencia del juez Casas. Para el abogado del condenado, la responsabilidad del peón surgía de las declaraciones del otro imputado, Eduardo Jurado, quien directamente lo acusó de ser quien les informó que González guardaba 50.000 pesos en su casa después de haber vendido un taxi dos meses antes del crimen. Otro argumento defensista fue que la mujer de la víctima vio a Jurado y no a Juárez apuntando contra su marido. Sin embargo, la Cámara los rechazó porque las otras evidencias recogidas durante la investigación y el juicio demuestran que Mosquito fue el asesino, que Jurado (a quien le secuestraron una pistola 9 milímetros que no es la que mató a González) no disparó y que el peón no participó del atraco.
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La Ciudad
