A fin de evaluar la posible suspensión del acuerdo que permite a los argentinos viajar a Estados Unidos sin necesidad de visa, la Secretaría de Justicia estadounidense decidió que en las próximas dos o tres semanas viaje a la Argentina un grupo de investigadores que tendrá la misión de inspeccionar in situ las condiciones de seguridad que existen en el país.
El informe será luego entregado a las autoridades migratorias de EEUU, que hará las recomendaciones correspondientes. La medida fue aparentemente tomada en el marco del reforzamiento de las medidas de seguridad que se vienen adoptando tras los atentados terroristas del 11 de septiembre.
Junto al de la Argentina, serán revisados también los convenios suscriptos con Uruguay, Italia, Bélgica, Portugal y Eslovenia. El anuncio oficial lo realizó el Departamento de Estado en Washington y fue confirmado por el embajador de Estados Unidos en Argentina, James Walsh.
Oficialmente se había indicado que la medida no está vinculada a los atentados del 11 de septiembre, pero una fuente de la embajada en Buenos Aires reconoció que si bien es una decisión que comenzó a estudiarse antes de esa fecha, los atentados "algo tienen que ver".
"Estamos revisando muchas cosas", comentó el vocero. Si bien aseguró no saber si los inspectores que vengan al país vayan a hacer "hincapié en la zona de la Triple Frontera, advirtió que "indudablemente tomarán en cuenta que allí hay un movimiento de actividades ilegales, así que van a tomar en cuenta la situación".
Sin embargo, dijo no saber si tendrán la intención de viajar a ese sensible punto. "Desde mi punto de vista, probablemente se quedarán en Buenos Aires", acotó.
"Viene funcionando bien"
Tampoco la fuente de la embajada pudo precisar si la inspección será particularmente exigente con Argentina. "Pueden hacer una recomendación para cambiar el acuerdo, o no", señaló, aunque admitió que hasta ahora, éste "viene funcionando bien".
Explicó que "hay que recordar que el movimiento de ciudadanos extranjeros de cualquier país está completamente bajo responsabilidad y vigilancia del Servicio de Inmigración y Naturalización" de Estados Unidos, que está bajo la órbita de la Secretaría de Justicia, y recordó que "la visa sólo representa el privilegio de subir a un avión y viajar a Estados Unidos".
La delegación que llegue de Norteamérica mantendrá entrevistas con el embajador James Walsh y con distintos funcionarios del gobierno, especialmente aquellos que actúan en el área de Migraciones.
Quieren precisiones
Estados Unidos desea obtener precisiones en cuanto a la seguridad de los pasaportes y la posibilidad de que puedan ser falsificados, razón por la que exige documentos de lectura electrónica. También está interesado en determinar exactamente cuál es el grado de cooperación entre las fuerzas de seguridad, en la eficacia de cada país en los controles de sus fronteras, en la reciprocidad en el tratamiento de los ciudadanos estadounidenses y en los antecedentes de rechazo de visas.
El permiso de viajar sin visa, firmado inicialmente durante la gestión de Carlos Menem cuando estaban muy aceitadas las relaciones entre Argentina y Estados Unidos, forma parte de un programa general que abarca a 29 naciones a los que Washington extendió lo que se denomina el visa waiver. Este programa se había planteado en forma provisoria pero finalmente una ley votada por el Congreso estadounidense en octubre del año pasado lo fijó como permanente. La norma prevé que los países que están bajo ese programa deben ser sometidos a una revisión cada cinco años. Argentina y los otros cinco países mencionados serán los primeros en ser revisados. (DyN)