La inquietud por el desencadenamiento de una presunta guerra bacteriológica se expande por todo el globo. En Sudáfrica, al menos 42 funcionarios del gobierno, entre ellos una docena de ministros, fueron sometidos el miércoles a análisis para detectar su posible exposición a esporas de ántrax, tras abrirse dos paquetes sospechosos enviados al despacho del presidente Thabo Mbeki. La policía y los bomberos acordonaron el despacho presidencial y expertos en explosivos llegaron a investigar los paquetes encontrados en el vestíbulo del palacio de Tuynhuys, aledaño al parlamento. Al abrir los paquetes, empleados del palacio presidencial encontraron un polvo blanco, por lo que se pidió la intervención de las autoridades.
El escozor también alcanzó a la embajada estadounidense en Lituania, donde ayer se anunció que los resultados preliminares de unas pruebas sobre dos sacas de correo recibidas en la sede diplomática dieron resultados positivos de lo que parece ser bacterias de ántrax. El laboratorio microbiológico del Centro Público de Salud de Vilnius fue el encargado de realizar los tests. Los resultados finales de los mismos se conocerán en un plazo del 48 o 72 horas y la oficina postal debió ser cerrada. Los empleados están siendo tratados.
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La Ciudad
