Los gobernadores de todo el país enviaron ayer una nueva contrapropuesta a la Nación para definir la interminable disputa que mantienen ambos por los fondos de coparticipación federal. Aunque la reunión estuvo a punto de fracasar por la impaciencia de algunos ante la intransigencia del Poder Ejecutivo nacional, finalmente los jefes provinciales lograron mostrar una posición común y ahora aguardan respuesta del jefe de Gabinete, Chrystian Colombo y del secretario de Hacienda, Jorge Baldrich, en un encuentro que mantendrán hoy al mediodía. El borrador de cinco puntos que llegó anoche a manos del gobierno nacional admite un recorte del 13 por ciento de los fondos de coparticipación pero sólo para aquellas provincias que accedan a refinanciar sus deudas con bancos a la tasa prometida del siete por ciento. Fuentes allegadas a los negociadores del lado de las provincias se mostraron confiados en que hoy se arribará a un acuerdo.
La contrapropuesta fue redactada por los gobernadores peronistas en una reunión que sostuvieron al mediodía en la Casa la Provincia de Córdoba, donde endurecieron su posición con la redacción de un documento de cinco puntos que bautizaron "Compromiso Federal por el crecimiento de la Argentina". El texto fue luego consensuado con los mandatarios aliancistas, quienes le introdujeron algunos retoques técnicos.
Con la Corte Suprema de por medio
Los gobernadores pretenden que el acuerdo sea homologado en los autos del juicio entablado por las provincias por la coparticipación. De ese modo, se asentará la potestad de la corte para dirimir en futuros conflictos. El texto del borrador consta de cinco puntos: \* Ratifican la garantía de 1.364 millones mensuales para las provincias y el mecanismo de "goteo automático" para la llegada de los fondos.
* Aceptan Letras de Coparticipación Nacional (Lecon) para el pago de hasta un 13 por ciento de las deudas nacionales. Las del período julio/octubre deberán ser saldadas antes del quinto día de noviembre, y la devengada en noviembre y diciembre en los cinco días posteriores de vencido cada mes.
* Admiten certificados Lecop en lugar de Lecon (la diferencia está en que éstos últimos son garantizados por la Nación) por un plazo de 90 días, hasta tanto el gobierno nacional emita los nuevos títulos. Vencido ese período se podrán canjear los valores. También admiten cobrar en las mismas condiciones una deuda histórica del 3 por ciento adicional del IVA con intereses a cargo de la Nación, y el pago en Lecon de deudas existentes fondos específicos como el del Fonavi, conurbanos y compensación del déficit previsional.
* Plantean que la refinanciación de las deudas comerciales de las provincias sea a una tasa del siete por ciento, sin capitalización de intereses, con garantía de la Nación, dos años de gracia en amortización de capital y 15 años de plazo. Las provincias que refinancien sus deudas aceptarán un descuento de hasta el 13 por ciento del piso de coparticipación, pero para el resto regirá la cifra fija.
* Aceptan la emisión de Lecop hasta la suma de 1.300 millones a cargo exclusivo de las provincias, para aquellas que lo soliciten y con las mismas características de las Lecon que utiliza el gobierno nacional para abonar la deuda por coparticipación.
El gobernador cordobés, José Manuel De la Sota, afirmó que no podía "dar una opinión sincera" sobre el éxito del nuevo documento porque no conocía "la opinión del gobierno", pero destacó que "todos los signos políticos nos pusimos de acuerdo en cinco puntos esenciales" \Al mediodía, tras la reunión en la Casa de Córdoba, el gobernador Carlos Reutemann enfatizó la exigencia de no tocar el piso de la coparticipación: "El gobierno debe mantener lo que se firmó", dijo.
El mandatario de Santa Cruz, Néstor Kirchner, por su parte, agregó que "existe un pedido concreto, y es que el gobierno consiga que se refinancien las deudas de las provincias con los bancos a una tasa del 7 por ciento".
Mientras los peronistas acordaban el documento en la Casa del Chaco, los mandatarios de la Alianza mantuvieron primero una reunión con Colombo, y se mudaron después hasta la casa chaqueña, ubicada al lado de la representación mediterránea, donde aunaron criterios de cara al encuentro de la tarde.
Al término de ese cónclave, el gobernador Iglesias dijo que "no se arribó a ningún acuerdo" (con el gobierno nacional), aunque aclaró que si bien "todavía hay distancias" en las respectivas posiciones, "estamos mejor de lo que estábamos ayer y antes de este encuentro".