Olimpismo: El deporte está condicionado por temor a atentados

Mientras las Olimpíadas de invierno se realizarán, están en duda otros torneos

A sólo 17 semanas de comenzar las Olimpíadas de invierno en Salt Lake City, el deporte internacional enfrenta una serie de problemas después de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos y el inicio de la guerra contra Afganistán.
El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el belga Jacques Rogge, aseguró recientemente al pueblo estadounidense que el movimiento olímpico no se intimidará por la violencia y que los Juegos se harán de todas maneras.
No obstante la promesa de Rogge y las medidas de seguridad sin precedentes que se pondrán en vigor en el Estado de Utah, no hay nada seguro en el deporte mundial.
El grupo francés de aseguradoras AXA canceló el contrato de cobertura que tenía con la Fifa para la próxima Copa del Mundo de Japón y Corea del Sur del 2002, por considerar que los riesgos del torneo, incluyendo terrorismo y cancelación, han aumentado considerablemente después de los ataques a Nueva York y Washington.
También cita como argumento la posibilidad de que ocurran otros incidentes en represalia por los ataques aéreos que lleva adelante Estados Unidos contra Afganistán.
Sin embargo, ayer la aseguradora francesa anunció que espera alcanzar pronto un nuevo acuerdo de póliza con la Fifa para la Copa del Mundo, obviamente que en otros términos, aunque no precisó fecha ni condiciones.
El comité organizador del Mundial de fútbol en Japón aumentó su presupuesto en 25 por ciento para pagar mayor protección policial y por el creciente incrementó en la adquisición de los detectores de metales en los 10 estadios donde se disputará el torneo.
La Copa Ryder de golf entre Estados Unidos y Europa, que estaba prevista para el mes pasado en Inglaterra, fue víctima temprana de los ataques al cancelarse y probablemente también se suspenda el Dessert Clasic en Dubai y el abierto de Qatar del próximo año.
Directivos de la liga de rugby de Australia cancelaron una gira por Gran Bretaña, aduciendo temores de seguridad de varios miembros del equipo.
También en Australia, dirigentes de la federación de natación adoptaron una medida sin precedentes al pedirles a sus atletas que firmaran una carta absolviendo a la organización de responsabilidad en caso de que murieran o fueran lesionados en actos terroristas de cualquier índole.
El portavoz de la federación dijo que la compañía de seguros que contrataron para proteger a sus equipos les advirtió que la póliza no los cubriría contra "actos o amenazas terroristas".
Las cartas fueron enviadas a los 13 integrantes del seleccionado australiano de natación que participará en el abierto de Estados Unidos el próximo mes en Nueva York, y probablemente se utilizará para los torneos de Copa del Mundo a disputarse en Brasil y Canadá.
Mientras, en el tenis, las hermanas estadounidenses Venus y Serena Williams cancelaron su participación en varios torneos de Europa.
"Después de los atentados, siento una fuerte necesidad de estar cerca de casa y de mi familia", dijo Serena.
Estos son solo algunos de los casos más conocidos de la forma en que los atentados del 11 de septiembre han afectado al mundo del deporte. (Reuters)