Casilda. - El Tribunal Electoral de la provincia hizo lugar a 7.311 denuncias de las casi 15 mil que presentaron los apoderados de partidos políticos mayoritarios y particulares para impedir que voten por autoridades comunales aquellos que tienen domicilios falsos. Además de estas impugnaciones, se supo que otros 22 mil santafesinos no podrán emitir su sufragio ya que la Nación no envió a tiempo la totalidad de los DNI que fueron tramitados en tiempo y forma (ver aparte). En este caso, el subsecretario de Justicia de la provincia, Carlos Carranza, deslindó responsabilidades (ver recuadro) del Estado santafesino.
En cuanto a los casos de domicilios falsos denunciados, algunas de las resoluciones fueron apeladas y generaron malestar por presuntas anomalías en el proceso de verificación de los reclamos.
Los electores cuestionados estarán habilitados para elegir únicamente diputados y senadores nacionales y estarán identificados en un padrón complementario, confeccionado por la provincia para conocimiento de las autoridades de mesa. Además los sobres que utilizarán para sufragar quedarán depositados en uno más grande que llevará impresa la palabra "observado" y recién serán abiertos y escrutados en Santa Fe.
Sanford y Villada
Mientras tanto, dirigentes del Partido Justicialista de Sanford y Villada consideraron que las verificaciones realizadas por el Tribunal Electoral en estas localidades para constatar la efectiva residencia de los electores "estuvieron plagadas de irregularidades". Son los únicos pueblos del departamento Caseros donde se plantearon impugnaciones. En Sanford no podrán votar para presidente comunal unas 79 personas (más del cinco por ciento del padrón) y en Villada 60.
Un candidato justicialista a presidente comunal de Villada, Raúl Rodríguez, reveló que el Tribunal Electoral no convocó a ningún representante del partido para observar el trabajo del veedor que se encargó de corroborar los domicilios denunciados. "Hicimos la denuncia, pero no pasó nada", dijo Rodríguez y precisó que de los 97 pedidos de impugnación que hizo el peronismo prosperaron 60. La Alianza Santafesina no hizo ninguna denuncia.
En Sanford, de las 52 impugnaciones de la Alianza fueron aceptadas 46, mientras que para el PJ solamente prosperaron 33 sobre 68. Esa diferencia tal vez explique el enojo del peronismo local, que aún no puede salir del asombro por la decisión del Tribunal Electoral "al habilitar para sufragar a varios electores que nunca vivieron o ya no están en Sanford".
El caso más emblemático en Sanford es el de Alicia Cantarini, que a pesar de vivir y trabajar en Rosario podrá votar en Sanford por haber fijado domicilio en un inmueble del candidato a presidente comunal por el radicalismo, Juan Carlos Reschini. Además, tuvo el privilegio de ser designada presidenta de mesa. "Está domiciliada acá porque en un remate perdió la casa que tenía en Rosario. Allá trabaja de lunes a viernes pero los fines de semana viene a Sanford", explicó Reschini para defender la situación de su pariente y agregó: "Me gustan las cosas claras y soy un respetuoso del Tribunal".
Al respecto, el secretario adjunto del justicialismo local, Oscar Desiderato, dijo que hubo mala intención por parte del radicalismo y consideró que "con estas artimañas no se ganan elecciones".
Cuando el Tribunal Electoral hizo las constataciones "varios de los electores denunciados por el justicialismo estaban en Sanford, a pesar de que ya no viven desde hace tiempo", aseguró Desiderato, quien se negó a firmar las actas de y tampoco acompañó al veedor a recorrer el pueblo porque "estaba todo armado", dijo.
"El día que vino el veedor había gente que ya no vive en Sanford. Está claro que alguien avisó de antemano. Acá nos conocemos todos y jugar de esta manera es tener mala intención", añadió el dirigente.
Respecto de los cuestionamientos esgrimidos por el peronismo sanforense, Reschini prefirió no hacer mayores valoraciones e insistió con que su comportamiento político pasa por respetar las decisiones del Tribunal Electoral. "Al margen de lo que diga el peronismo yo me acojo a lo que diga la junta", sostuvo, aunque reconoció que "hay gente de ambos partidos (radicales y peronistas) que votarán en Sanford y no viven acá".
En Sanford cuatro sublemas disputarán la comuna en las elecciones del próximo domingo, de las cuales dos corresponden al Partido Justicialista (PJ) y dos a la Alianza Santafesina (AS). Por el lado del peronismo van el actual presidente comunal Jorge Zaninovic, quien aspira ser reelecto, y Marcelo Neira, mientras que una de las listas de la oposición la encabeza el usandizaguista Juan Carlos Reschini y la otra la ex docente Rosa Montesanto. Zaninovic y Reschini son los que mayores chances tienen de ganar y desde hace años constituyen la clásica rivalidad de los comicios locales.
En tanto en Villada el legendario jefe comunal Angel Pizzichini prentende renovar su mandato una vez más, aunque para eso deberá ganarle al justicialista Raúl Rodríguez, quien intentará romper con la casi histórica hegemonía del gobierno radical.
Derecho a votar
"Me siento marginada", aseguró a La Capital Patricia Ceparo, quien no podrá votar para presidente comunal en Sanford a pesar de estar domiciliada legalmente en una vivienda cuya propiedad comparte con su ex esposo. "Estoy tres días por semana en Arequito por cuestiones de trabajo y regreso a Sanford donde tengo domicilio legal. Creo que tengo derecho a votar", dijo indignada la joven, para quien, "lamentablemente, la ley no es igual para todos".
"Hay gente -añadió- que nunca vivió en Sanford y, sin embargo, puede votar. Esto da bronca porque demuestra que no todos los ciudadanos tenemos los mismos derechos".
La Ciudad
