El recurso de amparo presentado ante la Justicia por una mujer embarazada de un feto que sería anencefálico (sin cerebro ni calota craneana) para que se la autorice a interrumpir el proceso de gestación desató la polémica. El vicario general del Arzobispado de Rosario, Luis Colliazuol, rechazó la idea de poner fin al embarazo y a pesar de admitir el "sufrimiento" que está atravesando la madre, consideró que "la criatura tiene derecho a nacer y a recibir el bautismo".
El juez en lo Civil y Comercial de la 13ª nominación, Rodolfo Bruch, espera los resultados de las pericias psicológicas ordenadas a la mujer y de los estudios médicos que determinarían si la joven de 24 años que interpuso un recurso de amparo está gestando un feto anencefálico.
Con los informes en la mano, el magistrado deberá resolver si hace lugar al pedido de la mujer que reclama la autorización para interrumpir el embarazo .
La joven está embarazada de 16 semanas y luego de que los médicos de la Maternidad Martin le practicaran dos ecografías, supo que el feto presenta anomalías. La vicedirectora de ese centro de salud municipal, Silvia Carbognani, apuntó que todavía no se pudo determinar si se trata de un caso de anencefalia o de encefalocele. En ambos casos se trata de defectos graves en el tubo neural del feto, lo que pone en riesgo su vida.
Para determinar cuál de los dos padecimientos es el que se observa, ayer se le realizó a la joven una resonancia magnética y hoy se podría conocer el resultado."Cuando tengamos los resultados del estudio podremos determinar si se trata de de anencefalia", explicó ayer a La Capital Guillermo Carroli, director de la maternidad, antes de aclarar que "cuando esté el diagnóstico definitivo, será entregado al juez que interviene en el caso".
La posición de la Iglesia
"La posición de la Iglesia siempre es a favor de la vida, desde el momento de la concepción hasta su término natural", afirmó el vicario general del Arzobispado. En declaraciones a la prensa, Colliazuol señaló: "Entendemos que puede haber grandes sufrimientos por situaciones como estas, pero eso no se termina eliminando a las personas".
El obispo a cargo del Arzobispado local, indicó que desde la Iglesia "se entiende el padecimiento de la madre", pero advirtió que "hay una vida que tiene que desarrollarse y nacer naturalmente".
El sacerdote dejó en claro su rechazo a la interrupción del embarazo. "Nos oponemos al aborto y defendemos la vida desde su concepción. Creemos que la criatura tiene derecho a nacer y a recibir el bautismo, si los padres son creyentes".
Criticó también a "aquellas sociedades que no entienden el sentido del sufrimiento y buscan a veces superarlo por encima de las consideraciones morales".
Cabe destacar que en la mayoría de los casos de anencefalia, si el feto llega vivo al nacimiento, muere a las pocas horas y excepcionalmente puede llegar a sobrevivir algunos días.
La prevención, una clave
Carbognani subrayó que los defectos en el tubo neural pueden prevenirse con el suministro de ácido fólico. "Es una vitamina que debería proporcionarse a las mujeres tres meses antes de embarazarse y fundamentalmente durante el primer trimestre de gestación", insistió la genetista.
Luego de aclarar que el ácido fólico se le está proporcionando a la mayoría de las embarazadas en la Maternidad Martin, Carbognani recalcó que "sería conveniente que todas las mujeres en edad de concebir tomaran esta vitamina en forma constante", teniendo en cuenta que no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios conocidos.