La encargada de prensa de "Gran Hermano 2", Gabriela Guareschi, aseguró que no se les comunicó a los participantes sobre los violentos sucesos ocurridos en los Estados Unidos y admitió que la producción del programa aún no resolvió cómo los concursantes cumplirán con su obligación electoral el próximo 14 de octubre. "El final del programa está previsto para fines de noviembre", afirmó Guareschi, y añadió: "Respecto de cómo votarán los participantes en las elecciones de octubre no sé como puede resolver la producción sobre este tema". Ante la evidente colisión entre una ley y las normas que rigen el desarrollo del juego la vocera fue tajante: "De hecho los pibes de la casa no pueden salir, es la realidad -dijo-. No creo que les traigan una urna al confesionario para que cada uno vote". Las excepciones que la ley prevé para los ciudadanos imposibilitados de concurrir a la votación difícilmente puedan aplicarse a los participantes de un reality show. "En el caso de que se los obligara a votar sería un despiole -añadió Guareschi-. Tendría que venir gente con una urna, con las boletas, votar en el confesionario. Sería realmente una cosa que no tiene sentido. Creo que va a pasar la elección y ellos no van a votar".
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