Durante buena parte de la entrevista, Alberto Natale mencionó repetidamente la necesidad de articular una nueva estrategia que posibilite el alumbramiento de un liderazgo moral y una alternativa política novedosa, en sintonía con los que exhiben las democracias más avanzadas. Cuando La Capital le preguntó si la fundadora del ARI, la diputada radical disidente Elisa Carrió, podría encarnar ese nuevo liderazgo, el diputado demoprogresista fue taxativo en su afirmación: "Hemos visto muchos casos de esta naturaleza, como Chacho Alvarez y Graciela Fernández Meijide. Y ahora apareció Carrió. Son fenómenos políticos que aparecen fulgurantes y que terminan desinflándose como pompas de jabón en la primera experiencia de gobierno. Hay que terminar con la denuncia fácil como instrumento de capitalización electoral y ofrecer alternativas de gobierno válidas y realizables. Me parece muy bien que se denuncie cuando hay fundamentos, pero también hay que construir política seriamente. Y creo que Carrió no la tiene".
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La Ciudad
