Es posible que Plaza apabulle a Alumni y a la fecha siguiente pierda con Olivos. Que dispute a muerte y hasta la última instancia frente a Hindú en Don Torcuato y después reniegue increíblemente para ganarle como local a Los Tilos, o que lo humille La Plata, o que le arruine la vida al CASI y luego no sepa cómo resolver, como ayer, la presión a la que lo somete el esforzado y encomiable Regatas Bella Vista.
Eso mismo le puede ocurrir en 80 minutos, es decir dentro de un solo partido. Como ante Los Tilos hace dos fechas. Un desastre en el primer tiempo; 22 a 0 en el complemento. Ellos lo saben, no esquivan el bulto, reconocen que casi siempre son los grandes responsables de las muy buenas actuaciones y de las enormes desilusiones.
Atlético perdió ayer con los auriazules de Regatas Bella Vista por 27 a 19 en el Pasaje Gould después de hacer gala de una gran gama de imprecisiones que dejaron el partido a pedido del más concentrado de los dos.
La actitud, la tan mentada actitud, casi más trascendente para el rugby que la calidad de los jugadores, le alcanzó y le sobró al equipo de los Camerlinckx para llevarse dos puntos valiosísimos que les permiten seguir alimentando una chance casi imposible de soñar antes que comenzara el torneo superior de la Urba.
De un lado (Regatas) presión permanente, un pack trabajador, generoso, aguerrido y ganador. Del otro (Plaza), imprecisiones, mala elección de las opciones a la salida de las formaciones fijas y arrebatos individuales imposibles de concretar que lo único que consiguieron fue alivianarle el trabajo a los bonaerenses para que recuperaran el control del juego con una rapidez asombrosa.
Cada vez que Regatas se acercó al ingoal de Atlético, o casi siempre, se volvió con puntos. En cada ocasión en la que Plaza pudo poner el juego en las 22 de su adversario sufrió muchísimo para recoger frutos. Es que generalmente sembraba confusión y dudas, e inexorablemente recibía contraataques.
A la media hora los visitantes ya ganaban 16 a 0 y ni siquiera un try convertido de Bartolucci 3 minutos más tarde sirvió para torcer el rumbo. Porque Plaza no tuvo inteligencia para aprovechar su cuarto de hora. Todo lo contrario, se fue al descanso 19 a 7 abajo después de haber tenido chances de tener más corto el resultado.
Hubo otro try de Octavio Bartolucci a los 21' de la segunda mitad, pero Cuesta Silva devolvió con la misma moneda siete minutos más tarde. Pero eso ya no tenía mucha importancia. La suerte estaba definida desde mucho tiempo antes. Desde el mismo momento en el que Plaza demostró que no tenía muchas ganas de parecerse al campeón saliente.
Alumni ya lo paladea
Alumni venció a Los Tilos por 34 a 22 y dio un paso importante para coronarse campeón del torneo superior de la Urba cuando restan tres fechas, ya que le lleva una ventaja de cuatro puntos a sus escoltas, Regatas de Bella Vista e Hindú. El encuentro se jugó en Tortuguitas con un parcial favorable al visitante de 15 a 11.
El ganador se mostró impreciso en la primera etapa y con muchos errores, pese a que al minuto de juego conquistó un try por medio del wing Federico Alsogaray.
Los Tilos se rehizo, pasó a tener el dominio del juego y su medio scrum, Santiago Axat convirtió cinco penales.
Alumni justificó con creces la victoria en la segunda parte, empujó a su rival y marcó otro try en el primer minuto, también por medio de Alsogaray.
Resultados generales: Olivos 39, San Luis 33; Champagnat 32, Hindú 46; Alumni 34, Los Tilos 22; La Plata 41, CASI 42; Atlético del Rosario 19, Regatas de Bella Vista 27; SIC 23, Pucará 17 y San Cirano 22, Pueyrredón 30.
Posiciones: Alumni, 18 puntos; Hindú y Regatas, 14; CASI y Los Tilos, 12, San Cirano y SIC, 11; Atlético del Rosario, 10; Champagnat, 9; La Plata y Olivos, 8; Pucará, 7; San Luis, 4, y Pueyrredón 2.
La Ciudad
