Año CXXXIV
 Nº 49.233
Rosario,
sábado  08 de
septiembre de 2001
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Utilizan una toxina mortal para aliviar dolores crónicos
Expertos británicos trabajan con un nuevo fármaco basado en un tóxico para que funcione como analgésico

Científicos británicos dijeron ayer que están transformando una de las sustancias mas tóxicas del mundo en un nuevo fármaco no adictivo que podría ayudar a aliviar el dolor crónico del cáncer y otros padecimientos. La neurotoxina botulínica es producida por una bacteria que puede hallarse en los alimentos contaminados o las heridas infectadas y que causa botulismo, una enfermedad rara pero mortal.
La toxina bacteriana se ha usado en dosis controladas muy pequeñas durante más de 10 años para tratar a los pacientes con parálisis cerebral, espasmos musculares y otras molestias causadas por contracciones musculares incontrolables. Asimismo, ha ganado popularidad como tratamiento para las arrugas bajo el nombre de Botox.
Científicos del Centro de Microbiología Aplicada e Investigación, una rama del Ministerio de Salud de Gran Bretaña, están trabajando con un nuevo fármaco basado en la toxina que promete ser un analgésico efectivo, inocuo y no adictivo.
"Las moléculas que estamos desarrollando no son tóxicas", dijo en una conferencia científica Keith Foster, quien dirige el proyecto. Al comprender la estructura de la toxina y sus diferentes propiedades, Foster y sus colegas han podido idear una molécula similar con las propiedades benéficas de la toxina natural de la bacteria, pero sin sus efectos colaterales.
Además de brindar las bases para un nuevo analgésico, Foster y su equipo también esperan usar la parte de la toxina que se dirige a las células nerviosas como un sistema de liberación para llevar otros agentes terapéuticos, como genes o enzimas, al sistema nervioso. "Sólo nos dirigiremos hacia las células que requieren tratamiento", dijo.
Los resultados experimentales han revelado que hay posibilidades de dirigir la toxina a los nervios que son responsables del dolor y bloquear su función durante muchas semanas. "Esto abre la posibilidad de poder construir en esta área de la investigación y desarrollar novedosos productos farmacéuticos para el tratamiento del dolor crónico", dijo Foster.
Michael Barnes, de la Universidad de Newcastle, en Tyne, en el noreste de Inglaterra dijo que la toxina natural actúa mediante el mejoramiento de la función de los músculos. (Reuters)


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