Resulta extraño escuchar decir hoy a Simonian que "López se está comportando con total corrección con nosotros". O que "no puedo estar todo el tiempo mirando para atrás. Lo que pasó, pasó". Pasó mucha agua bajo el puente, pero casi caprichosamente es como si nada hubiese pasado. Y a más de uno le parecerá excesivamente lejano e inverosímil entonces lo que sucedió hace algo más de un año en ese duro enfrentamiento con el presidente rojinegro, que terminó con su presentación en la convocatoria de acreedores y en una presentación en la Justicia penal de Buenos Aires.
"Yo me presenté en el concurso de acreedores de Newell's con los 12 millones de dólares que me corresponden de acuerdo a los papeles que tengo. En la primera instancia el juez dictaminó que me corresponde 1.800.000 dólares. Ahora hicimos otra presentación, también de primera instancia, que es de revisión, donde volví a presentar toda la documentación reclamando los 10 millones restantes y eso ahora lo decidirá el juez", señaló.
-A casi un año de aquellos sucesos, ¿cómo está su relación con López?
-Mi relación con López es simple. Mis mejores jugadores del staff, además de D'Alessandro y Romagnoli, son los de Newell's. Y López se está comportando correctamente, tanto con Dodici como con los jugadores. Está siendo totalmente claro, nos dice qué jugadores son intransferibles y quiénes no, con lo cual la relación hoy es de un respeto y una corrección mutua. Después tengo un reclamo judicial -el de la convocatoria- y tengo que seguir pensando en el futuro, que los chicos sigan creciendo y que en algún momento se pueda hacer alguna operación.
-¿Y la causa penal que le inició en Buenos Aires, en qué instancia está?
-Eso está relacionado con la operación de Diego Mateo. El único fin que tiene esa denuncia es poder recibir el dinero que nos corresponde por su venta.
-Resulta extraño escucharlo hablar tan cordialmente del hombre al que hace meses no lo quería ni nombrar.
-Yo te voy a contar. Desde el punto de vista económico, lo que pasó fue dramático para nuestra empresa. Tanto que estuvimos a punto de desaparecer. En ese momento todo lo malo que me pasaba yo se lo atribuía al problema con Newell's. Hoy la situación se revirtió, estamos muy fuertes nuevamente, tenemos a los jugadores más importantes del país. Lo que pasó, pasó, y a partir de ahora tendré que tomar otra actitud. Además mi relación actual con el presidente se reduce únicamente a los contratos de los jugadores, porque yo no tengo intereses económicos de futbolistas, todos están volcados en la convocatoria. Trato de sacar lo mejor para los jugadores y de dejar lo que le corresponde a Newell's, que ha sido mi cantera personal como representante, mi trampolín. ¿Qué opción tengo? ¿No hablar más con López y dejar a todos estos jugadores? Quizá esta relación de representante-presidente, que tenemos en la actualidad, es la que debí haber tenido siempre y no haberme puesto a invertir en derechos económicos de jugadores que es una figura que ni siquiera la Fifa reconoce.
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La Ciudad
