Marcelo Bielsa aclaró ayer sobre la controversia suscitada respecto de quién debe ser el centrodelantero titular del equipo nacional que "Gabriel Batistuta puede ocupar un lugar en el banco de suplentes", tal como lo hizo antes Hernán Crespo. "Existe la posibilidad de que Batistuta vaya al banco. Pero no como expresión de desafío del entrenador respecto de un ídolo popular. Es muy difícil conducir un grupo de elite si uno no está dispuesto a reclamar a cada uno lo que les va a aplicar a todos. Y los futbolistas que integran un equipo saben que potencialmente existe la chance de que sean suplentes", explicó Bielsa.
Y rápidamente, ante el conflicto que podrían originar sus palabras, Bielsa se apresuró a aceptar que está dispuesto a "admitir que todo esto genere algún tipo de repercusión extra. Pero el tratamiento que estoy obligado a darle al asunto en mi intimidad es puramente futbolístico", remarcó.
"Pero no agrego a esta situación en particular ningún elemento de juicio que no haya manejado cada vez que tomé una decisión: observo, comparo, evalúo y decido. Puede haber un margen de error y admito que determinadas decisiones repercuten en algún tipo de futbolistas en particular y generan más efervescencia. Pero yo trato de aislarme de ese clima", aclaró.
"No creo que sean reglas conflictivas. Los jugadores lo tienen que considerar y los conductores tenemos que aplicarlas. De cualquier manera, no descarto la posibilidad de cambiar el esquema", aventuró Bielsa al analizar la eventualidad de incluir a Crespo y Batistuta como titulares en el futuro.
"A Batistuta no lo convoqué para jugar con Brasil aplicando los mismos criterios que utilicé para todas las convocatorias. El cerró la temporada anterior con dificultades. Este año empezó haciendo una pretemporada completa y la competencia oficial lo va a ir situando en su mejor forma. Ese es un dato que yo considero", alertó.
El entrenador también admitió que "no es sencillo tomar decisiones cuando repercuten sobre un futbolista que es ídolo popular. El espectador y el hincha tienen una visión del tema. Los periodistas, otra. Y el técnico también tiene una forma de evaluar", puntualizó.
"Lo concreto es que tomé la decisión considerando lo que me pareció mejor para las necesidades del próximo partido, evaluando todos los elementos que uno considera para tomarla. Si lo llamaba también me hubieran criticado por improvisar un esquema nuevo en un partido tan importante. Cuando uno toma un camino siempre está abandonando otro. Pero no hay ningún problema personal con Batistuta", avisó.
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La Ciudad
