Enojado con un editorial que le adjudicaba segundas intenciones a su oposición a cambios en la Ansés, el líder de la UCR, Raúl Alfonsín, protagonizó ayer una polémica personal con el presidente Fernando de la Rúa, la primera de ese tenor desde que la Alianza está en el poder. "Ni en la época de (Carlos) Menem sufrí estas cosas", disparó el ex jefe del Estado, en una clara muestra de su ofuscación.
Lo cierto es que Alfonsín acusó directamente a "sectores del gobierno" por los ataques que dijo sufrir. Además, le exigió a De la Rúa el mismo respeto que él le profesa y una rectificación, que no tardó en llegar por parte del primer mandatario, quien desmintió una presunta campaña en contra del titular de la UCR.
Alfonsín había estallado de rabia en el programa Desayuno, de Canal 7, cuando leyó ante las cámaras un editorial del diario La Nación donde se sostuvo que su oposición a los cambios en la Ansés generaban en la ciudadanía "la firme sospecha de que los intereses y las intrigas de índole política han prevalecido sobre las decisiones de carácter técnico y profesional".
Tras apuntar contra sectores del gobierno -que no identificó- por esa "infamia", pero asegurar que el presidente "tiene que conocerlos", Alfonsín señaló que le "gustaría" que De la Rúa "me lo rectificara inmediatamente, porque yo le tengo respeto y él me debe respeto".
Paños fríos
El jefe del Estado recogió el guante de inmediato y, al salir de la Casa Rosada para asistir a un acto, descartó "absolutamente" cualquier campaña contra el líder partidario.
"Todos tenemos respeto y afecto por Alfonsín. Nadie del gobierno puede hacer mucho menos una campaña. No vi esa declaración, pero aun desconociéndola, digo esta expresión de consideración que siempre ha existido", aclaró.
En tono componedor, aunque con gesto adusto, De la Rúa destacó que de parte de Alfonsín "siempre hubo una actitud solidaria y cooperativa con el gobierno".
El editorial en cuestión sostenía también que esa actitud de prevalencia de los intereses políticos sobre los técnicos "revelan un viejo mal, que es la confusión entre partido y gobierno", frase que también provocó la reacción del ex jefe del Estado.
"Jamás me ha consultado el presidente de la Nación", resaltó Alfonsín, quien puso como ejemplo que no conoce qué se va a firmar con el FMI.
Y, después de aclarar que "no hay nada más que una relación de convivencia que tiene que existir entre dos personas que se conocen", se refirió a una supuesta maniobra detrás del artículo periodístico: "Lo que se exhibe claramente (es que) son comentarios que llegan del gobierno".
El lunes pasado, Alfonsín se había pronunciado -a través de un comunicado- en contra de lo que considero avances del cavallismo en sectores como la Ansés y el Pami. Ayer, De la Rúa ratificó la importancia de llevar adelante en esos organismos una reforma "que ponga austeridad y rigor en el gasto y eficiencia en la administración".
En rigor, el cruce entre el mandatario y el titular de la UCR le pone clima al plenario partidario programado para hoy, donde se emitirá un documento sobre la situación nacional que incluirá, según se espera, una firme exhortación al gobierno de unidad reclamado por Alfonsín.
El ex presidente dedicó la mayor parte del día de ayer a elaborar un crítico documento hacia la administración de De la Rúa. En el escrito, Alfonsín plantea "la necesidad de que el gobierno rectifique el rumbo económico" y sugiere una posible reprogramación de la deuda externa.