Bogotá. - Las fuerzas antinarcóticos ocuparon ayer una refinería de combustible que operaba la guerrilla en el sur del país, según informó el ejército colombiano. Tropas de los batallones antinarcóticos, que cuentan con entrenamiento estadounidense, ocuparon la refinería en el departamento del Putumayo.
Al amanecer los soldados ingresaron a la zona de Teteyé, a unos 550 kilómetros al sur de Bogotá, donde unos 300 guerrilleros vigilaban las instalaciones que contaban con la capacidad de producir 2.000 galones de combustible al día. En los combates que prosiguieron durante toda la jornada, murieron por lo menos seis presuntos miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), la principal guerrilla del país, y han sido incautados ocho fusiles automáticos.
Según los militares, el combustible era utilizado como insumo para la fabricación de cocaína. Los rebeldes se lo entregaban a los campesinos a cambio de la hoja de coca. El hallazgo de la refinería se produce en el marco de la operación "Apocalipsis", que ha permitido la destrucción 43 laboratorios para la elaboración de droga y el decomiso de 100 toneladas de insumos químicos en los últimos 10 días.
Aunque las Farc han negado su participación directa en el negocio del narcotráfico, reconocen que protegen a los campesinos que cultivan la coca, de la cual Colombia es el mayor productor a nivel mundial. Además, cobran un impuesto a la producción conocido como gramaje que es una de sus principales fuentes de financiamiento.
El apoyo de Estados Unidos
Estados Unidos apoya la guerra antidrogas con 1.300 millones de dólares, gran parte de los cuales se han destinado al envío de uno 60 helicópteros de combate y al entrenamiento de 2.500 soldados. Esta semana está prevista la llegada de una delegación estadounidense encabezada por el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos, Marc Grossman, que visitarán bases militares donde tienen sede los batallones antinarcóticos.
La visita de más alto nivel desde que el presidente George W. Bush asumió el cargo se produce en momentos en que sectores de Estados Unidos analizan la conveniencia de dar ayuda para enfrentar directamente a las guerrillas en Colombia.
La Ciudad
