Cadi, un lugar para personas especiales en San Lorenzo

En el centro de discapacitados trabajan 19 operarios que fabrican artículos de limpieza y los comercializan en la región

San Lorenzo.- "Son personas con discapacidad". Julia pone especial énfasis en esta expresión. Es madre de un joven con síndrome de Down, hace siete años que preside el Centro de Apoyo al Discapacitado (Cadi) y es responsable de la Dirección de Atención a la Persona con Discapacidad de la Municipalidad. Cadi, que tiene su local en barrio José Hernández, es un lugar que alberga a jóvenes discapacitados cuando finalizan sus estudios secundarios. Antes de dar este paso los chicos con síndrome de Down cursan en la escuela Santa Mónica. "Son etapas, desde bebés con la estimulación temprana hasta que terminan sus estudios y algunos empiezan a trabajar como operarios en Cadi", aseguró Julia Di Leo.
En el centro, los 19 operarios fabrican todo tipo de artículos de limpieza y los comercializan. "Son elementos de primer nivel y hay una gran variedad, nos sirve para mantenernos y además los trabajadores reciben una gratificación", comentó Di Leo, quien no tiene palabras para "agradecer a la comunidad sanlorencina y de la región por el apoyo constante".
Marzo estaba por empezar cuando Di Leo y un grupo de personas iniciaron el proyecto de Cadi. Era 1994 y nacía este espacio que es muy importante para las personas con discapacidades. "Desterramos el mito del discapacitado aislado y oculto de la sociedad. Con el centro y la escuela hubo un gran proceso de integración y relación con la comunidad", contó Di Leo.
Cadi no es una institución ajena a la crítica realidad económica. "Hay cinco personas trabajando que son de oro, tienen sueldos atrasados y vienen al centro como si estarían cobrando grandes sumas", comentó la presidenta de la asociación civil quien aseguró que "todo se solventa con mucho pulmón". La ayuda del gobierno nacional es casi nula. "En el país hay cinco mil operarios que están la misma situación y si no se percibe una ayuda económica es muy difícil continuar", señaló Di Leo, quien junto a otras asociaciones del país marcharon para pedir una ley que contemple un programa específico para los talleres protegidos de producción donde trabajan personas con síndrome de Down.
Además de las tareas de elaboración de artículos de limpieza, en el centro también hay actividades recreativas como el teatro Musas y Musos Capacitados que crearon los mismos operarios. "Estamos organizando el séptimo encuentro de teatros especiales provinciales que se realizará el 24 de noviembre", dijo Di Leo, quien resaltó el entusiasmo y empeño que ponen los operarios en sus actividades.
El más joven de los que forman parte del centro tiene 24 años y el más grande 57. El grupo de diecinueve operarios ingresan a trabajar a las 8 y terminan su jornada a las 13. Cadi cuenta con maquinarias propias con las que se realizan los artículos de limpieza. "Ellos los hacen y los comercializan, son productos de primera calidad", afirmó Di Leo. Los interesados pueden comprar los materiales en la sede del centro ubicada en República de Paraguay y Ayohuma o al teléfono [phone].