Lima. - El presidente peruano Alejandro Toledo pidió en su primer mensaje a la nación que se frene la compra de armas en Sudamérica para dar prioridad a las urgencias sociales en la región. El planteo causó perplejidad en el presidente chileno, Ricardo Lagos, cuyo país se apresta a adquirir aviones F-16 norteamericanos. "Quiero aprovechar esta ocasión que se encuentran reunidos todos los presidentes de los países sudamericanos para proponer una inmediata congelación en la compra de armas ofensivas en la región", dijo Toledo entre aplausos de los 11 jefes de Estado que asistieron a la transmisión del mando en el Legislativo. El anunció pareció caerle de sorpresa al mandatario chileno, Ricardo Lagos, quien demoró en aplaudir la iniciativa y cuyo gobierno tiene planeado comprar próximamente a Estados Unidos 10 aviones caza F-16 por 714 millones de dólares. También Brasil planea renovar su flota de aviones de combate. La compra chilena fue notificada en junio por el Departamento de Defensa estadounidense al Congreso de ese país. Para los analistas, la compra chilena de los aviones rompería el equilibrio militar de América del Sur, lo que podría forzar a otros países de la región a destinar mayores recursos al rearme.
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