Jorge Sansó de la Madrid Atilio Pravisani
Con la sola certeza de que al menos por ahora no habrá recortes salariales en la provincia, todas las miradas convergen sobre el retorno del gobernador Carlos Reutemann a la Casa Gris a las siete de hoy para conocer los parámetros con que Santa Fe llegará al déficit cero este mismo año y no en el 2003, de acuerdo al compromiso firmado ayer en Buenos Aires.
"Vamos a estudiar con precisión cómo se puede llegar al déficit cero", fue todo cuanto prometió el Lole al término del acto en la Casa Rosada y antes volver al silencio. Tres cuestiones cobran trascendencia en la mayoría de las especulaciones respecto a la postura que adoptaría la provincia. Dos son esencialmente económicas: el acceso a un crédito blando de 330 millones del Banco Mundial que se resolverá (positivamente, se confía) mañana y la gestión de un "Certificado Federal para la Región Centro" emitido por la Nación que Reutemann y su par cordobés, José Manuel De la Sota, que negocian con Domingo Cavallo para cancelar obligaciones.
El elemento político es la buena relación que une a Reutemann con Cavallo y que el ministro de Economía se esfuerza por cultivar. Ayer no pasó desapercibido para quienes valoran el dato de que Cavallo casi arrastró al Lole a la firma de un acuerdo de competitividad para la producción arrocera que tuvo lugar a posteriori de la del pacto de gobernabilidad con las provincias justicialistas.
Las precisiones, se espera comenzarán a delinearse, no bien Reutemann se siente hoy con el ministro de Hacienda, Juan Carlos Mercier y el secretario general, Domingo Esquivel, entre otros colaboradores como se sabe que hará.
Un principalísimo aliado que parece alentar un mínimo alivio diferenciador en los funcionarios santafesinos es que no existirían urgencias de caja en la provincia, pero tanto Reutemann como Mercier (el ministro brindó ayer una conferencia de prensa en la capital provincial) se encargaron de señalar que ahora dependerá de que la Nación cumpla efectivamente "como no lo hizo en el pasado" sus compromisos para que se pueda eliminar por completo el déficit.
"Tiene que ver mucho con que la Nación cumpla las cuestiones que tiene que ver con nosotros. En el caso de Santa Fe, Córdoba y Santa Cruz, habíamos firmado que la Nación nos haría un aporte compensatorio del déficit previsional (que en parte no cumplió). Si la Nación no cumple lo que habíamos firmado, evidentemente estamos en una situación difícil", dijo el Lole.
Cuando le preguntaron al mandatario si aplicaría un recorte salarial en Santa Fe respondió: "Todavía no. Lo vamos a estudiar con toda precisión". En tanto, extraoficialmente se dijo a La Capital en la Casa de Gobierno que "lo que se ha conversado hasta ahora es que no hay espacio para un recorte salarial. De hecho rige la emergencia económica que ya representa un recorte salarial.
No existen todavía precisiones respecto de las características que tendría el Certificado Federal de la Región Centro, pero fue De la Sota quien admitió que se está estudiando. Este bono (que no se llamaría así para diferenciarlo tanto de los bonos bonaerenses como de cualquier otro que se pueda emitir y de ese modo resaltar su condición de herramienta diferenciada para la región) permitiría un alivio extra tanto para Santa Fe como para Córdoba.
Un alivio que se sumaría al crédito sobre el cual resolverá mañana el directorio del Banco Mundial, que servirá para cancelar otros créditos tomados a alta tasa y corto plazo.
El ministro Mercier señaló que "en el acuerdo que habíamos suscripto con el Banco Mundial va a ser tratado este jueves por el directorio, con parte de las autoridades nacionales ya que este es un juego de tres". El préstamo es por 330 millones de dólares a una tasa que ronda el 7,5%.
Mercier diferenció el pacto firmado por las provincias de la Alianza del Acuerdo para la Gobernabilidad suscripto ayer con la Nación por los Estados justicialistas en "donde se insta a determinadas acciones de gobierno". Afirmó que se trata "de un hecho inédito donde ya no hay un acuerdo federal unívoco al firmar medio país una cosa y el otro medio otra".
El ministro aclaró que lo que suscribieron las provincias del PJ es un Acuerdo de Gobernabilidad en donde el ajuste en las provincias se practicarán de acuerdo a las pautas que ellas mismas se fijen, mientras que en cambio los gobernadores aliancistas suscribieron un pacto que se asemeja más a una ley de ejecución forzosa.
El funcionario que estuvo al lado del gobernador durante todas las negociaciones, consideró poco sólido el acuerdo ya que las condiciones políticas no son las mejores. Sostuvo que no puede ser que en 18 meses de gobierno se hayan firmado tres convenios que el gobierno nacional desconoció recurrentemente, y acotó: "La firma llega por el espanto y no por la razón. Estos son los coletazos y los vaivenes de una política, errática, incoherente y que lamentablemente se soporta por el espanto más que por el raciocinio", refrendó.
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La Ciudad
