Los mercados reaccionaron ayer de forma positiva al acuerdo entre las provincias y el gobierno nacional para avanzar en una política de déficit cero y le dieron un respiro a la Argentina, que se tradujo en una notoria baja del riesgo país luego de varias jornadas consecutivas de fuertes pérdidas. El indicador de riesgo país, que en las últimas semanas se transformó en casi una obsesión para los funcionarios del gobierno y la oposición, los banqueros, empresarios y hasta el común de la gente, quebró ayer la barrera de los 1.500 puntos y después de bajar 187 unidades (más de un 10%) cerró en 1.439 puntos básicos. La inversión de la tendencia negativa en ese indicador, que mide la confianza de los inversores internacionales en la economía argentina, estuvo cimentada en un salto del 8,33 % en los precios del bono Global 2008; y del 10,85 % en el FRB. El acuerdo con los gobernadores peronistas, las negociaciones con los empresarios para que anticipen el pago del impuesto a las ganancias y la posibilidad de que la semana próxima se concrete un canje de Letras del Tesoro (Letes) por cerca de 4.000 millones de dólares que le permita al gobierno retirarse del mercado en los próximos seis meses, ahuyentaron las dudas de los inversores sobre una eventual cesación de pagos. La escena se repitió en la Bolsa porteña, que no sólo mostró una suba de 4,84 % al cierre de las operaciones, con un incremento en el volumen de operaciones, que llegó a los 28,73 millones de pesos, sino que en algún momento de la jornada llegó a subir un 5,50%. "Los inversores que habían apostado a un escenario negativo y jugaron vendidos en el mercado, decidieron que ya se habían cubierto lo suficiente y volvieron a apostar en los títulos y acciones argentinas", explicó un operador. La fuente destacó que "esa decisión arrastró a los inversores que habían retirado sus posiciones de la Argentina por el pánico que se desató en los mercados frente a la ola de rumores sobre un posible acuerdo entre el oficialismo y la oposición para avanzar con un recorte de las erogaciones estatales". "Claramente, la resolución del conflicto político tiene efectos positivos sobre la plaza local y el escenario que se plantea para el mercado es más positivo", explicó Luciano Rolón, analista de Allaria Ledesma sociedad de Bolsa. El analista advirtió "que la incertidumbre aún no se disipó y las turbulencias pueden continuar, por lo que el inversor que decida entrar ahora debe tener espaldas suficientes como para soportar vaivenes y apostar al mediano plazo". Así como en los últimos días los temores a una posible cesación de pagos de la Argentina afectaron sensiblemente a los mercados brasileños, ayer el optimismo se trasladó a esa plaza y los bonos del principal socio del Mercosur se recuperaron, el real se apreció fuertemente y cotizaba en 2,499 reales por dólar, mientras que las acciones líderes del Bovespa subieron un 2,59%. Las acciones de empresas españolas, que había sucumbido a los golpes del efecto Tango, también se recuperaron ayer y el Ibex 35 de Madrid terminó la rueda con una suba del 0,97 %, impulsada por Telefónica y Banco Santander Central Hispano (BSCH), que recibieron con agrado el acuerdo entre el gobierno argentino y la oposición para eliminar el déficit público. La corriente positiva se trasladó también a Chile, donde el dólar cerró a la baja por una fuerte venta de divisas por parte de las empresas y los bancos, que llevaron el valor de la moneda estadounidense hasta los 660,10 pesos, 8,50 menos que en la jornada del lunes.
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