La Dirección de Tránsito municipal libró actas de infracción a taxistas por cruzar en rojo la esquina de Sarmiento y Córdoba, donde no sólo no existe esa señal luminosa, sino que desde hace 28 años una de esas calles es peatonal. Así lo denunció la Asociación Mutual Taxistas Autoconvocados (Amta). La entidad aseguró que estas irregularidades se multiplican no sólo en cantidad, sino en el tipo de infracción: en su sede de Casilda al 900 se han recepcionado unas 22 denuncias en tan sólo 30 días. Y cada resumen de estas infracciones significa para titulares y choferes de taxis montos que oscilan entre los 700 y los 6.000 mil pesos.
Para los dirigentes de Amta, los inspectores "están adiestrados para hacer boletas a los taxistas, quienes son víctimas de una recaudación indiscriminada e ilegal". Como una forma de sostener sus dichos, no sólo aportaron ejemplos de infracciones dignas de Ripley, sino que aseguraron que las boletas llegan con seis años de retraso o se recepcionan sin la opción de haberlas firmado al momento de la contravención.
Por todo esto, la institución le exigió al Tribunal Municipal de Faltas la suspensión en el cobro de estas multas, al tiempo que le solicitó "al intendente (Hermes Binner) y a los concejales que investiguen estas irregularidades".
Semáforos "invisibles"
"Esto es de locos, han llegado boletas por cruzar en rojo Sarmiento y Córdoba, cuando es sabido que no tiene semáforo y encima es un paso peatonal", lanzó ofuscado el presidente de Amta, Edgardo Encina.
La copia que exhibió el dirigente a La Capital no refleja un caso atípico, sino que las multas por cruce en rojo en esquinas sin señales luminosas se repiten en San Lorenzo y Sarmiento; Urquiza y Mitre o Entre Ríos y San Lorenzo.
"Según pudimos averiguar, te ponen en la boleta el cruce en rojo, cuando en realidad es porque no se acató una señal del inspector, algo relativo", planteó Encina. El dirigente le atribuyó una razón a este desliz: "Confeccionan la infracción de esta manera porque la multa por no respetar un semáforo es mucho más elevada por desobedecer a un zorro ", aseguró.
Por otro lado, varios tacheros nucleados en Amta expresaron su indignación ante el arribo un tanto demorado de las actas de infracción. "Están llegando sorpresitas de hace seis años, ¿cómo confirmamos que la boleta estuvo bien hecha?", se preguntó Encina.
En efecto, la mutual de los tacheros recopiló un cúmulo de situaciones de este tipo. "A un compañero le vinieron diez actas entre el 94 y 95. Tenemos la documentación que prueba todo esto", apuntó el directivo. Otros casos acumulan un récord de infracciones en una misma jornada. "¿Se pueden cometer 14 contravenciones de tránsito en sólo un día y en distintas intersecciones?", volvió a cuestionar con indignación el dirigente.
Según las apreciaciones de Amta, las infracciones labradas a los taxistas responden "a un sistema que la Municipalidad aplicó para recaudar sí o sí, y en esa línea adiestra a los inspectores, en vez de inculcarles prevención o educación vial", consideró Encina, para azuzar: "Están boleteando al revoleo y dejan un chiquero".
Para Amta, mientras las infracciones no estén firmadas por el infractor o el inspector no deje copia del acta, las multas deberían quedar en suspenso hasta que se establezca la veracidad de la contravención.
"Si las multas se notifican en un período posterior a los 30 días y carecen de la firma del infractor deberían eliminarse", remató Encina.
La Ciudad
