El seleccionado argentino de rugby ya se encuentra en la tierra de los All Blacks donde jugará cuatro partidos

Pumas sueltos en Nueva Zelanda

En el plantel hay tres rosarinos: José Orengo y Leonardo Roldán, de Plaza, y Alfonso Amuchástegui, de Jockey

Pablo F. Mihal

Los Pumas ya están en Nueva Zelanda para comenzar una de las giras más duras en lo que a rugby se refiere. Durante 19 días el equipo dirigido por Marcelo Loffreda y Daniel Baetti realizará un periplo que comprenderá cuatro partidos internacionales, uno de ellos ante los All Blacks.
En el primero de los enfrentamientos Los Pumas jugarán contra Counties Manukau (el próximo 17), luego se medirán con Thames Valey (el 19), más tarde lo harán con la selección de Nueva Zelanda (el 23) y finalizarán la gira frente a Nueva Zelanda Maorí (el 26).
Dentro de un plantel con un montón de jugadores profesionales hay tres rosarinos, tres rugbiers amateurs que dividen su tiempo en entrenamientos, partidos y ocupaciones personales, llámense trabajo, estudio o familia, y que viven este periplo con muchísima intensidad. José Orengo, Leonardo Roldán y Alfonso Amuchástegui saben que no todos los días se dan este tipo de vivencias. Y antes de partir dialogaron con Ovacion.
De los tres, el que más experiencia tiene en Los Pumas es José Orengo. Por eso a la hora de analizar a Los Pumas, el Negro tiene un panorama más amplio. Y al turno de dar su opinión no ahorra palabras: "Creo que después del Mundial, Los Pumas subieron un escalón, o más bien afianzaron algo que por ahí se suponía", confió el centro de Atlético del Rosario. "Entonces, a partir del Mundial y jugando ante potencias como Australia, Sudáfrica e Inglaterra y alcanzando buenos resultados, yo creo que los últimos años se dio un paso muy grande hacia adelante", confirmó el jugador de Plaza Jewell.
En menor medida, el segunda línea de Plaza Leonardo Roldán ya tuvo también su experiencia en el seno del plantel del seleccionado argentino. Por eso, a la hora de buscar qué es lo que tienen que mejorar Los Pumas para continuar por la buena senda ambos analizan el tema de una perspectiva diferente.
"Creo que el juego abierto, para sorprender a los rivales. El juego cerrado, el de los forwards, de protección de la pelota es bueno", enfatizó Roldán para señalar el punto más deficitario de Los Pumas.
Josi Orengo, en tanto, no fue tan preciso y se refirió al proceso en sí: "Por ahí es difícil tomar como punto de partida el pasado Panamericano como un comienzo de año. Yo creo que ahora en Nueva Zelanda, con todos los jugadores disponibles (ya que se suman los que estaban jugando el campeonato de Francia) vamos a seguir practicando para afianzarnos más en el juego que queremos hacer. Igualmente, hay que trabajar muchísimo".
Tanto uno como otro saben que la gira por Nueva Zelanda será sumamente dura. "Particularmente es un desafío tremendo porque lamentablemente no me pude preparar como corresponde por mis compromisos laborales. Cuando vuelvo después de cada gira tengo que trabajar el doble para recuperar mi ausencia, por eso tomo esta gira como el desafío más importante de mi vida" señaló Roldán, quien graficó en pocas palabras las peripecias muchas veces poco sabidas de los rugbiers amateurs.
-¿Es conveniente hacer una gira así?
-Sí, yo creo que sí. Más allá de mi situación personal creo que es muy buena para el plantel (Roldán).
-Sí, mientras tengamos más juego con las potencias del rugby mundial es mejor, te sirve para ir aprendiendo, avanzando (Orengo).
-¿Cómo vivieron el torneo Panamericano?
-Fue una linda experiencia. A los equipos los vi con mucho vigor físico, no tanto en la parte técnica. Fue una experiencia espectacular. Fue el debut con Los Pumas y tuve la suerte de marcar un try (Roldán).
-En el Panamericano hubo 15 jugadores que por primera vez jugaban un test match y por ahí es difícil que las cosas salgan, más si el grupo se junta una semana antes. Creo que en el primer partido, contra Uruguay, no se dieron las cosas pero a partir de ahí el equipo fue madurando y terminó jugando contra Canadá con mucho orden táctico (Orengo).