El paro nacional dispuesto ayer por la CGT disidente fue la oportunidad para que los alumnos, tanto de las escuelas oficiales como privadas, se pegaran un gran faltazo en Rosario. Esto provocó que en la ciudad no se dieran clases, más allá de que algunos maestros hayan concurrido a los establecimientos. Algo llamativo, si se tiene en cuenta que la departamental local de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) había resuelto parar sin concurrir a los lugares de trabajo. Donde no se repitió el mismo panorama fue en el resto de la provincia; allí, los docentes decidieron dar clases casi normalmente. No obstante, debido a la falta de transporte urbano, en la ciudad de Santa Fe también se notó una merma en la actividad escolar.
Mientras tanto, el panorama resultó desolador en las facultades de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). Los profesores oficiales nucleados en Coad y también los técnicos de Fagdut adhirieron masivamente a la medida de fuerza, por lo que las casas de altos estudios ni siquiera abrieron sus puertas.
A través de un relevamiento realizado en el horario de ingreso del turno mañana, La Capital comprobó que la decisión de los padres de no enviar a sus hijos a clases fue una constante. Al menos esa fue la respuesta que dio la mayoría de los porteros.
Tanto en el Normal Nº2 (Córdoba 2084), como en el Dante Alighieri (Oroño 1160), en el La Salle (Alem 1100) y en la escuela Nº60 (Paraguay 1251), los maestros cumplieron el horario escolar, aunque las aulas permanecieron vacías. En el colegio de la colectividad italiana se comunicó que esa decisión se debió a la voluntad de "garantizar la libertad de trabajo".
En el San Bartolomé (Tucumán 1257) se trabajó, pero sólo con los diez alumnos de la EGB que concurrieron sobre un total de 500.
También hubo escuelas a las que sólo concurrió el personal no docente. Tal el caso de la Juana Arzeno (Ovidio Lagos 1064).
Además, hubo establecimientos educativos que se mantuvieron literalmente cerrados durante toda la jornada. Tal fue el caso del Complejo Educativo Gurruchaga (Salta al 3300) y de la Pestalozzi (Mendoza al 3900).
Un acatamiento dispar
Cuando La Capital le preguntó ayer al secretario general de Amsafé, José María Tessa, por qué el acatamiento al paro había sido tan dispar en toda la provincia, hizo alusión a las "marcadas diferencias" regionales. "En las dos ciudades más grandes (Santa Fe y Rosario) -señaló- la falta de transporte hace que las escuelas estén completamente vacías. Y con respecto a la presencia de algunos docentes en las escuelas a pesar de la decisión gremial, no se puede dudar que se trata de no perder el presentismo".
No obstante, dijo que el gremio está de acuerdo con el paro y sus reivindicaciones, a pesar de que Amsafé "ha sido crítica de la metodología aplicada por el sector de Moyano, ya que el paro debió haberse trabajado más con las bases", opinó.
En cambio, entre los maestros nucleados en el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) el acatamiento fue más parejo. Según señaló la secretaria general del gremio, María Lazzaro, esa respuesta se dio no sólo con los docentes de Rosario, sino de todo el país.
En las 12 facultades de la UNR el paisaje no fue menos desolador. La representante del gremio de los docentes universitarios (Coad), Marcela Delannoy, dijo que el acatamiento fue "contundente" tanto en las facultades como en las tres escuelas de la UNR: Instituto Politécnico, Superior de Comercio y Agrotécnica de Casilda.
En la UTN, salvo en un curso de maestría que se dictó a última hora de la tarde, tampoco hubo actividad académica.
La Ciudad
