La Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) se apresta a darle un duro golpe a la evasión impositiva en el comercio de granos. Las dos delegaciones del fisco que operan en el sur de Santa Fe pusieron la mira en la supercosecha de soja y, con el flamante sistema de control satelital de cultivos estiman que podrán reducir de una manera drástica y en un mediano plazo la evasión en la comercialización de la oleaginosa.
"Va a haber un quiebre, un antes y un después. Con una nueva herramienta como es el control satelital de las cosechas, un método cuya eficacia es indiscutible, no sólo resulta más fácil evitar la evasión sino que además fomenta la prevención, ya que los contribuyentes antes de hacer una venta en negro lo van a pensar muy bien", resaltó el jefe de la Afip Rosario Región II, Luis Bossi.
El nuevo sistema del que habla el funcionario es similar al de fotografías aéreas que toman los municipios para detectar las construcciones no declaradas en las ciudades.
A fines del año pasado, la Afip compró el servicio de imagen satelital, a través del cual se sacan fotos que, por medio de un proceso de radiaciones, detectan qué tipo de cultivo y qué cantidad de hectáreas cultivadas hay en cada zona. Luego, los inspectores cruzan esos datos con los informes y mapas de Catastro para identificar quién es el dueño de cada uno de los campos y terrenos fotografiados.
Posteriormente, el fisco le gira a los contribuyentes una nota donde se les informa que el gobierno conoce la cantidad de hectáreas sembradas y con qué cultivo, y se les pide que confirmen esos datos. Además, solicitan que informen a qué acopiador o cooperativa le van a vender o vendieron la cosecha, y qué tipo de seguro o cobertura tienen, entre otras cosas.
Con esos números en la mano, la Afip hace una estimación de los rendimientos y ganancias que tendría que tener cada contribuyente al término del ciclo productivo. Y una vez que terminó la comercialización del grano, cruza los datos que recabó con las declaraciones juradas de IVA y ganancias de los productores e intermediarios para ver si coinciden. En caso de encontrar diferencias de importancia, los sabuesos inician los operativos para regularizar la situación.
El ensayo con el trigo
El sistema se empezó a utilizar a fines del año pasado en Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba para la cosecha de trigo. "En el sur de la provincia los controles sobre el trigo fueron como una especie de puesta a punto, porque sólo el 20% del área está cultivada con ese grano.
En cambio, con la soja -que representa el 70% del área cultivada- los resultados van a ser más importantes", explicó la jefa del Departamento de Investigaciones de la Afip Rosario Región II, Blanca Arteaga.
Con respecto a los resultados del seguimiento satelital del trigo en la zona, los inspectores encontraron un diez por ciento de desvíos importantes entre lo que el contribuyente declaró y lo que tendría que haber declarado. En la actualidad, la Afip avanza en la investigación de esos casos, de los cuales no trascendieron más precisiones.
"El dato más importante para rescatar en el caso del trigo es que el margen de error de las imágenes satelitales de los tipos de cultivos y las hectáreas cultivas con respecto a lo que los contribuyentes luego confirmaron fue del 0,37%, una cifra ínfima que muestra que con esta nueva herramienta la evasión de granos tiene que bajar de manera considerable", destacó Arteaga.
"Ahora la Afip sabe con lujo de detalles las hectáreas cultivadas y el rendimiento de cada campo, y no les va a perder el rastro a la producción al momento de la comercialización. Nosotros sabremos la existencia de la cosecha de cada campo y como esta no se puede esfumar tiene que aparecer registrada en las declaraciones juradas de impuestos", apostó Bossi.
Por estos días, el fisco busca difundir la existencia del nuevo sistema, una tarea que se viene desarrollando por medio de charlas a los productores, para mostrar que de ahora en más va a ser más difícil evadir.
"Nosotros no buscamos aumentar los castigos, sino evitar que se concrete la evasión haciendole tomar conciencia a la gente que va a ser mucho más fácil detectar las ventas en negro", completó el funcionario.
La soja en la mira
Con respecto al seguimiento de la soja, la supercosecha 2000/2001 de más de 20 millones de toneladas, es una oportunidad que el fisco no dejará pasar. Los analistas calculan que cerca de ocho millones de toneladas de soja se comercializarán en el centro-sur de Santa Fe a través de las operaciones que se registran en la Bolsa de Comercio de Rosario.
Alguien está mirándote
Los inspectores de las dos delegaciones de la Afip que operan en el centro sur de la provincia de Santa Fe ya tienen en sus mesas de trabajos las imágenes satelitales de los campos de la región.
Además, el fisco ya relevó 26 mil partidas catastrales con terrenos cultivados con soja y le mandó cartas a 1.390 contribuyentes para que confirmen los datos que obtuvieron por medio de las fotos aéreas, y además agreguen la información que requieren, como por qué vía van a comercializar la oleaginosa de esta campaña.
Mientras esperan que termine la comercialización y lleguen las declaraciones juradas de IVA y ganancias, los sabuesos continúan con las charlas promocionales del sistema en las ciudades del interior de la provincia, haciendo los operativos de controles tradicionales y siguiendo la evolución del mercado en lo que hace a rendimiento y precios de la soja.
"Para los meses de julio y agosto, cuando termine el ciclo de comercialización y tengamos las declaraciones impositivas realizaremos las acciones correspondientes para regularizar los casos en que hayamos detectado irregularidades, pero confiamos en que la evasión en el comercio de soja puede llegar a bajar de una manera muy considerable", remató Bossi.