La Justicia allanó el edificio de la Asociación de Martilleros de Rosario, Entre Ríos al 200, y secuestró "gran cantidad" de documentos relacionados con las subastas judiciales que podrían servir para identificar a los miembros de la denominada liga, una supuesta organización mafiosa que arregla los remates para comprar propiedades a precio vil y revenderlos en montos muy superiores. El procedimiento judicial duró casi seis horas y se centró en las oficinas del tesorero de la Asociación, Amadeo Chaina, quien está detenido bajo sospecha de integrar la organización. Entre el material incautado hay videos, expedientes judiciales, agendas personales y gran cantidad de papeles pertenecientes a Chaina que ahora serán analizados detenidamente por el juez de la causa y por los expertos que colaboran con él en la investigación sobre la banda delictiva.
El allanamiento se practicó el miércoles, según revelaron ayer a La Capital distintas fuentes vinculadas a la causa, y fue ordenado por el juez de instrucción Carlos Carbone, secretaría de Sergio Donato. El operativo estuvo a cargo de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la policía provincial, y fue supervisado por el funcionario judicial Pablo Berazategui, mano derecha del magistrado en esta investigación.
Una pila de expedientes
Según los datos aportados por voceros judiciales, el enviado de Carbone y cuatro efectivos de las TOE entraron en el edificio de la Asociación de Martilleros a las 16 y recién se fueron cerca de las 22. En ese lapso recogieron tanta cantidad de documentos que les llevará días analizar en profundidad su contenido y determinar qué elementos pueden convertirse en indicios o pruebas contra la liga y sus integrantes.
Algo que llamó la atención de los investigadores es la cantidad de expedientes judiciales que hallaron en las oficinas de Chaina. "La pila era impresionante", describió ante este diario una fuente que estuvo en contacto directo con quienes practicaron el allanamiento. Entre esos expedientes había de todo, pero la mayoría eran sobre quiebras personales o demandas de ejecución prendaria o hipotecaria con sentencia firme y con subastas decretadas.
Uno de los objetivos de la búsqueda era documentar la identidad de las personas que asisten a las subastas que se realizan en la Asociación de Martilleros, y detectar si algunas de esas personas concurre habitualmente a los remates. Para los investigadores, sería una buena manera de comenzar a delinear una lista de sospechosos, especialmente cuando pongan bajo la lupa los remates realizados por Chaina o la martillera y vocal de la Asociación Rosanna Fagniani, quien también está detenida y sospechada de arreglar subastas para garantizar que los bienes rematados queden en mano de compradores previamente digitados.
Videos y papeles
Para llegar al objetivo, los detectives pusieron especial atención en dos cosas: los videos donde se registran cada uno de los remates que se hacen en la Asociación, por orden de la Corte Suprema de Justicia, y el registro de ingreso de los asistentes. Esto último puede convertirse en un elemento clave para las pesquisas ya que cada persona que ingresa a la sede debe mostrar su documento de identidad, que a su vez es fotocopiado por la custodia y archivado por la Asociación.
"Esto es lo que Carbone fue a buscar en el allanamiento. Si la sospecha es que hay un grupo que digita el resultado de los remates, esto sin dudas puede servir para identificar a las personas involucradas", confió ayer una de las fuentes consultadas por este diario.
-¿Ya hay resultados a partir del análisis de los documentos incautados?
-No, es demasiado pronto. Es más: secuestraron tantos papeles que posiblemente va a llevar días estudiarlos.
Sin embargo, la búsqueda de Carbone y las TOE no sería a ciegas ya que en el juzgado habría una lista preliminar de sospechosos, y lo que tratan ahora es ver si esas personas concurrieron a los remates que están bajo la lupa del juez e incluso si lo hacían habitualmente cada vez que se realizaba una subasta. Es más: algunas de esas personas ya habrían sido interrogadas y habrían asegurado que no eran habitués, algo que los detectives esperan poder corroborar con los documentos secuestrados el miércoles.
En el juzgado creen que estas medidas podrían desembocar, en el corto plazo, en nuevas detenciones. Por esa razón guardan los documentos bajo tres llaves y cuidan celosamente que nada se filtre al exterior. Fuera de esas paredes, en cambio, nadie parece creer que Chaina, Fagniani y los particulares Roberto Cozzolino y Alberto Conde -también encarcelados- sean los únicos integrantes de la organización mafiosa. Y mucho menos los cerebros o jefes de la tan mentada liga .