Old Resian estuvo a un paso de dar la gran sorpresa de la jornada. Le faltó esa pizca inevitablemente necesaria de experiencia para saber manejar los últimos minutos de un partido con final cerrado. Sólo seis minutos le faltaron para dar el gran zarpazo. Seis minutos y un scrum.
El mayor mérito de los tricolores estuvo en plantearle el encuentro de igual a igual nada menos que al puntero del torneo Regional del Litoral. Y en realidad estuvieron muy cerca de lograr el triunfo.
Faltando nueve minutos para la finalización del partido, Fernando Sedán tomó la pelota luego de un line casi en la mitad de la cancha, levantó la cabeza, apuntó, midió y clavó un drop milimétrico que ponía otra vez al frente a los locales. La gente comenzó a enloquecerse al ver la posibilidad concreta de llegar a la victoria.
Pero tres minutos después, los santafesinos sacaron fuerzas de sus flaquezas en el momento más complicado y consiguieron el try de la consagración fieles a su estilo histórico. Robaron un scrum en el propio campo de Old Resian y por el lado corto el colorado Gómez Paris se zambulló en el ingoal para estirar la racha, el invicto y la locura de Universitario.
Cualquiera de los dos podría haber ganado. Y en ambos casos habría razones valederas que avalarían el logro. Lo cierto es que el conjunto de la capital de nuestra provincia se prendió en el momento justo, contó con más aplomo e hizo pesar su mayor roce en primera división. Y eso marca sensibles diferencias a la hora de definir un pleito en un certamen tan parejo, donde las diferencias entre los participantes parecen imperceptibles.
El arranque del cotejo mostró a los locales moviendo la pelota con gran velocidad e intentando un juego con mayor dinámica que su rival. Así llegó el try de Cresto cuando todavía los espectadores se estaban acomodando.
De a poco Uni fue controlando la mayor movilidad de los hombres de Old Resian y sobre el cierre del primer parcial ya había impuesto su rugby. Juego cortado, muchas infracciones, patadas posicionales para zafar de la presión hicieron que el trámite del encuentro se volcara para la visita.
En el complemento Old Resian se dio cuenta de que no podía desplegar su juego y comenzó a utilizar kicks estratégicos al fondo para avanzar en el terreno y generar mejores chances. Como no encontró la claridad para romper el cerrojo defensivo de los santafesinos, tuvo que recurrir al efectivo pié de Sedán para anotar y treparse a la ilusión. Y con tres penales y un drop, el equipo tricolor estuvo a punto de lograr lo que hubiera sido la confirmación tangible de los notables progresos del rugby de Old Resian.
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La Ciudad
