Año CXXXIV
 Nº 49.096
Rosario,
lunes  23 de
abril de 2001
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Un cordobés que atendía a víctimas de atentados
Mario Goldin es el primer muerto argentino desde el comienzo de la Intifada. Vivía en Israel desde 1977

"Todavía no sabemos si vamos a hacer alguna presentación ante las autoridades argentinas o israelíes. Estamos destrozados. Mario estaba muy contento de vivir allá y era muy apegado a su familia", contó Fanny Goldin, tía del médico Mario Goldin, el argentino de 53 años muerto ayer en un atentado suicida en Israel. Fanny Goldin vive en Buenos Aires al igual que los dos hermanos de la víctima. En el atentado además de Goldin murió el kamikaze palestino y resultaron con heridas de diversa índole medio centenar de personas, todas ellas transeúntes.
El médico, primera víctima argentina desde el estallido de la violencia entre israelíes y palestinos, tenía 53 años y era padre de tres hijos. Goldin se encontraba en la parada de colectivos de las calles Chernikowsky y Weizman, en el centro de la ciudad de Kfar Saba, distante 20 kilómetros de Tel Aviv, cuando un comando palestino hizo explotar una bomba que llevaba adosada a su cuerpo.
Goldin "se especializaba en tratamiento del dolor y trabajaba en Israel con víctimas de atentados", relató su tía, quien explicó que sus dos hermanos no podrán viajar al funeral porque se realizará hoy.

Confirmación oficial
El cónsul argentino en Tel Aviv, Eduardo Pérez Ibarra, confirmó oficialmente la muerte del médico argentino. Mario Goldin, padre de tres hijos, se encontraba en el centro de la ciudad de Kfar Saba, distante 20 kilómetros de Tel Aviv, cuando estalló el explosivo. Goldin es el primer argentino muerto desde que comenzó la nueva Intifada que estalló el pasado 28 de septiembre y que ya contabiliza 485 víctimas mortales, además de miles de heridos.
El médico era uno de los más de 70.000 israelíes-argentinos que emigraron hacia el Estado judío. Goldin se dirigía al Hospital Meir de Kfar Saba, donde los domingos realizaba un curso de especialización profesional, mientras que el resto de la semana trabajaba en el Centro de Rehabilitación Levinstein, de la vecina localidad de Raanana.
Oriundo de Córdoba, Goldin se había recibido de médico a mediados de la década del 70 en la universidad de la docta y residía en Israel desde 1977 (plena dictadura militar), donde desarrollaba su actividad especializada en tratamientos contra el dolor. Entre los 50 heridos de diversa consideración que causó el ataque se hallaba un adolescente en estado grave.
Durante sus primeros años en la profesión trabajó como médico rural en su provincia y en La Pampa y "siempre buscó relacionar su trabajo con los principios de solidaridad y de ayuda a la gente humilde", relató a Néstor Alberto Goldin, primo hermano de la víctima.


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