Lima. - Los tres candidatos presidenciales con mayores opciones en los comicios peruanos de mañana acentuaron ayer sus promesas a un electorado que, según nuevos sondeos, elegirá al próximo mandatario del país en una segunda vuelta electoral. Mientras 14,9 millones de peruanos aptos para votar se aprestaban a sufragar por tercera vez en un año, la publicidad electoral copó la programación televisiva con promesas de mejorar los golpeados bolsillos de la población, más empleos y combatir la corrupción.
Los actos proselitistas en Perú quedaron prohibidos a partir de la cero hora de ayer para que los votantes entren en un período de reflexión para elegir entre ocho candidatos a su próximo presidente.
Un nuevo sondeo ratificó el viernes que Alejandro Toledo, un economista de 55 años, va primero en las preferencias, seguido en una lucha codo a codo entre la abogada Lourdes Flores, de 41 años, y el ex presidente Alan García, de 51. "Es mejor que todo se defina en la primera vuelta porque habrá menos incertidumbre", pidió Toledo en una entrevista televisiva al intentar atraer parte del electorado indeciso. "Necesitamos poner al Perú a trabajar y eso significa primero reactivar la economía. Tenemos una guerra frontal contra la pobreza", agregó el candidato de centroizquierda.
Una pesada herencia
Según analistas, el gobernante que asuma el poder el 28 de julio de manos del presidente interino Valentín Panigua deberá lidiar con una recesión, un elevado índice de desempleo, extendida pobreza y corrupción. Perú vive aún las secuelas del mayor escándalo de corrupción que derrumbó en noviembre a Alberto Fujimori, que gobernó por 10 años, a raíz un video donde su prófugo ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos presuntamente sobornaba a un legislador.
\Los comicios, que serán monitoreados por varios observadores internacionales, vienen precedidos por una campaña que en los últimos días estuvo plagada por actos de agresividad física y verbal entre los candidatos. "Queremos invitar a los indecisos a que no miren el pasado sino que miren al futuro", pidió por su parte Flores, cuya oferta electoral se basa en el fomento a la inversión, educación, salud y lucha contra la corrupción. García, que estuvo asilado por ca si nueve años en Colombia, apeló en tanto a su carisma y oratoria para buscar un poco más de votos que le permitan pasar a una segunda vuelta. "Construiremos un gobierno con justicia social", prometió, tras insistir en la necesidad de cambiar el actual modelo económico neoliberal.
\García gobernó a Perú entre 1985-1990 en un régimen marcado por una hiperinflación de 7.000 por ciento y acusaciones de sobornos por un millón de dólares, que aún se investigan. Una encuesta de la Universidad de Lima dijo ayer que Toledo encabeza las preferencias con 41,5 por ciento de votos válidos, mientras Flores tiene 24,3 por ciento y García 23,5 por ciento. Un 14,6 por ciento del electorado está indeciso. El resultado confirma las dudas que quien definiría la presidencia en una segunda ronda con Toledo pues ninguno de los aspirantes logrará el 50 por ciento más uno. "La primera vuelta será tranquila. Pero habrá enfrentamientos en la segunda", pronosticó el cosmobiológo Rubén Jumvluth.
\Los primeros resultados a boca de urna se esperan apenas termine el acto electoral a las 16 hora local.
\Las elecciones buscan poner punto final a una prolongada crisis política, que realmente comenzó cuando Fujimori ganó un tercer mandato consecutivo el año pasado en un proceso electoral plagado de irregularidades y denuncias de fraude. Tras una indefinida primera vuelta en abril, Toledo boicoteó la segunda en mayo -a la que había pasado con el entonces mandatario- denunciando un fraude, e inició una dura oposición a Fujimori. El escándalo desatado en torno a Montesinos obligó a Fujimori a convocar a elecciones adelantadas, pero en noviembre se refugió en Japón, desde donde envió su renuncia. El Congreso lo destituyó.