Según Aparicio, hay varias premisas para lograr el equilibrio social, económico y político en las Américas, tales como reconocer que es necesario mejorar la calidad de la democracia y crear una cultura de democracia en la sociedad. "Para ello se requieren reformas, más participación y mayor transparencia e inclusión, a fin de que los intereses colectivos puedan ser satisfechos", sostuvo el funcionario de la OEA. En ese marco, indicó que "hay que admitir que se tiene todavía que lograr verdaderas democracias: las sociedades americanas carecen de unidad social debido a que muchos todavía no tienen acceso a los recursos que satisfagan sus necesidades básicas, y también, admitir que todos los grupos sociales no tienen actualmente representación: todavía subsiste la exclusión cultural en la región". En ese contexto, según el especialista, se debe reconocer que las economías y políticas no son mutuamente excluyentes, ya que una buena economía es posible sólo si existe un sistema político fuerte. Lo mismo se aplica a cultura y sociedad. Las políticas sociales no son efectivas a menos que se respete la diversidad cultural.
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