El ex jefe del Estado Carlos Menem lanzó ayer una sorpresiva jugada política al pedir que se posterguen las elecciones legislativas de octubre próximo hasta el 2003, pero fue rápidamente desactivada por el presidente Fernando de la Rúa, quien la rechazó de plano.
"Eso no está comprendido en las facultades" especiales que el Congreso otorgó al Poder Ejecutivo, respondió De la Rúa cuando se lo consultó durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, donde reseñó los resultados de su viaje al Vaticano.
Menem, desde la provincia de Córdoba, sostuvo que "vivimos en emergencia y le aconsejaría al presidente de la Nación, ya que tiene algunos poderes derivados del articulo 76 de la Constitución nacional, que postergue las elecciones de este año para el 2003 y que prorrogue el mandato de quienes actualmente ejercen las funciones que iban a ser ocupadas por otros, los que resulten electos en octubre de este año".
Luego de descartar la iniciativa, adelantó que hoy analizará con el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, el proyecto de reestructuración del gobierno que le encargó antes de partir hacia Roma.
En este sentido, intentó quitar espectacularidad al tema al pedir que "no se hable de cambios de gabinete, sino de cambios de estructuras" ya que su intención es "hacer más eficiente al Estado". Consultado si en esa modificación estructural tenía previsto convocar al Frepaso o al sector alfonsinista de la UCR, De la Rúa replicó: "La pregunta es simpática pero ociosa. Estoy pensando en las estructuras y no en las personas".
Previamente, apenas arribó al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, el presidente ratificó la continuidad de la convertibilidad y evitó pronunciarse acerca de la posibilidad de establecer una paridad cambiara basada en una "canasta de monedas".
"La situación económica es un tema muy amplio sobre el que estamos trabajando todos", señaló De la Rúa, para enfatizar: "Mantenemos la convertibilidad".
El encuentro con el Papa
Asimismo De la Rúa no se mostró molesto por los cuestionamientos realizados por distintos medios periodísticos acerca del tiempo que insumió su viaje y la comitiva que lo acompañó. "Comprendo que por la libertad de prensa que gozamos haya críticas", señaló.
\Sin embargo, justificó el viaje en compañía de sus familiares ya que, según dijo, ello "significa que hay valoración de la familia en las políticas de gobierno y que el presidente está orgulloso de ir con su familia a saludarlo (al Papa) y pedir su bendición".
\De la Rúa señaló que "esto es muy claro: en una visita al Santo Padre, la familia tiene valor especialmente" y agregó que "sinceramente, el Santo Padre se alegró muchísimo que estuviera la familia".
\"Puede haber algunos que no les gusta la visita al Santo Padre y no comparte las posiciones que el presidente ha sostenido, pero como todos los viajes que hago al exterior, lo hago para trabajar por el país", enfatizó De la Rúa.
\Respecto de la entrevista que mantuvo con Juan Pablo II, el presidente dijo que el tema de la pobreza y los problemas sociales en la Argentina los expuso él y agregó que en ese sentido hubo "coincidencia" sobre la necesidad de hallar políticas para superar esa situación.
\Además, comentó que le había expresado al Papa que "la defensa de la familia, la paz y la vida eran objetivos centrales de mi gobierno".
\Finalmente, refutó críticas sobre su visita en Italia a los futbolistas argentinos Gabriel Batistuta y Abel Balbo. "El presidente no puede negar el saludo a los argentinos que están en el exterior y tienen éxito", respondió.
La Ciudad
