María Angélica Gastaldi sostuvo que "la mayoría de las personas que vienen a la Defensoría carecen de los medios para acceder a una consulta con cierto grado de confiabilidad". Añadió que "la gente está llena de temores y miedos de lo que le pueda ocurrir. En un estudio efectuado, constatamos que tener un abogado de confianza es vivido como un factor muy importante para las personas". -Una suerte de refugio. -Lo piensan como si fuera un escudo protector frente a cierto tipo de problemas, pero como contrapartida y quizás por ese mismo "poder" o "potencial" que depositan en la figura del abogado también se generan grados de desconfianza. En nuestra institución y por ser éste un servicio estatal se busca la mejor solución o camino posible. Es por eso que en la práctica también funcionamos, como otras defensorías, en la asistencia legal impersonal.
| |