Ayer fue la movida de la costa, hoy es Pichincha y mañana ¿qué zona será? Las quejas encendidas por los ruidos, la instalación de vendedores ambulantes, los desmanes, el caos vehicular y otras delicias nocturnas no cesan. Los vecinos del Bar del Mar (Balcarce y Tucumán) se sumaron ayer a los reclamos de sus pares de Pichincha. "Es un infierno y está cada vez peor. Alrededor del boliche se juntan mil autos y puestitos de venta con la cumbia a toda marcha, se pasean travestis, la gente eructa, escupe y vomita", sintetiza Marcelo, uno de los vecinos que se precia de no ser lindero del bar. "Si no, le juro que ya le habría prendido fuego", se exalta. Según sus denuncias, la policía sólo responde a sus llamados diciendo que no está "para asustar a la gente", y la Municipalidad "se pasa la pelota de un funcionario a otro".
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