Bauza: "Prefiero jugar al límite a ser un equipo pasivo"

El técnico no cree que las tarjetas sean un problema

Veintiseis tarjetas amarillas en siete partidos. Casi cuatro por encuentro. Cinco expulsiones en siete presentaciones. Las sanciones muestran a Central como el equipo más castigado por los árbitros. Es obvio que los protagonistas le echarán la culpa a las circunstancias, pero también existen motivos futbolísticos. Bauza elige la primera opción.
"Prefiero eso a un equipo pasivo como nos sucedió en el primer torneo que jugamos. Por miedo a que nos amonestaran no metíamos. Nos dieron el premio fair play y terminamos con 25 puntos, en la mitad de la tabla y dando lástima. Prefiero la agresividad y jugar al límite. Nosotros no nos sabemos defender. Tenemos que ir al límite con todos los riesgos que eso implica. Ya lo hablamos y medimos los riesgos".
-La respuesta parece un consuelo. Es como tomar la menos peor de las opciones.
-Lo ideal sería que el equipo juegue igual y que los árbitros fueran tan permisivos como son con otros equipos.
-Esa también es una excusa.
-No, es la realidad. Revisemos las 26 amonestaciones y nos vamos a dar cuenta, si las comparamos con otros equipos, que no son iguales. Pero asumimos los riesgos.
-Pero son riesgos que te quitan puntos. El partido con Lanús lo perdieron por las expulsiones.
-Porque Bassi amonestó mal.
-Quizás la primera amarilla haya estado mal, pero el jugador amonestado debe aprender a jugar con ese estigma en la cabeza.
-Es que no hubo infracción.
-Supongamos que es así. Pero el jugador que comete la infracción asumió un riesgo innecesario en tres cuartos de cancha.
-Era una jugada de gol. Central pierde los partidos porque no acertamos adelante, no por las amonestaciones. Esa es la única razón por la que no tenemos más puntos. Si hubiéramos estado derechos para el arco contra River, Colón y Vélez ganábamos. Y no perdíamos ni con Lanús ni con Estudiantes. Me parece que estamos buscando razones que no existen. Central juega al límite desde hace casi dos años. Y así salimos subcampeones. En esa época la metíamos.
-El volante central juega muy expuesto por el sistema. ¿No hay una segunda opción para protegerlo un poco?
-Sí, jugar con dos líneas de cuatro. Pero la estructura del equipo está armada para atacar. Si fuéramos efectivos seríamos un equipo bárbaro. La mala racha no nos permite tener como mínimo cuatro puntos más.
-La pretenciosa actitud de ser siempre ofensivo ofrece huecos al rival. Puede suceder ante Independiente.
-Pero vos no sabés si lo voy a atacar a Independiente. Después del partido hablamos. La idea no es salir como loco a buscar el partido. este es un equipo que todavía no aprendió a ir perdiendo. Nos pensamos que tenemos que empatar a los 5 minutos y nos terminamos exponiendo más de lo que corresponde. Nos pasó con Lanús y Estudiantes. La desesperación de generar y no convertir nos confunde y nos convierten.