El comisario Juan Carlos Robles, encargado del operativo de seguridad para el partido entre San Lorenzo y Huracán, garantizó ayer que "no habrá contacto ni visual" entre los hinchas de ambos clubes que asistirán esta tarde al estadio Nuevo Gasómetro para presenciar el clásico. "Podemos garantizar que no habrá ni contacto visual entre los hinchas. Para ello organizamos un importante operativo de seguridad que comenzará desde muy temprano y abarcará una amplia zona a modo de prevención", dijo el titular de la seccional 42 de la policía federal. Robles reveló que en el transcurso de la semana un equipo especial de investigación de la policía participó a modo encubierto de reuniones mantenidas por las barras de San Lorenzo y Huracán en "sus tradicionales puntos de encuentro". "En el seno de las hinchadas, todos dicen: «no seamos boludos, no hagamos quilombo porque vamos a ir presos. Nos va a estar viendo todo el país»", explicó el comisario. En ese sentido, el funcionario de seguridad atribuyó "a un descolgado" las pintadas amenazantes que aparecieron días atrás en el estadio de Huracán "para infundir un falso temor", por lo que decidió soslayar un tema al que se le había dado otra trascendencia en los primeros días de la semana. No obstante, los antecedentes no son buenos porque en el último clásico jugado en el Nuevo Gasómetro (el 19 de diciembre de 1997) un hincha de Huracán (Ulises Fernández) fue asesinado por un grupo de barras de San Lorenzo. Para hoy, la policía federal dispuso un operativo de seguridad que estará compuesto por 780 efectivos, que comenzarán a trabajar desde las 11 de la mañana, una hora y media antes de que se produzca la apertura del estadio. El número de agentes estará distribuido en grupos de combate, caballería, división perros, motos de tránsito, 3 camiones hidrantes, 2 helicópteros, 44 móviles, 13 brigadas de investigaciones y otra de bomberos. En tanto, habrá un vallado perimetral de 500 metros alrededor del estadio y se desplegará un dispositivo preventivo en las avenidas Vélez Sarsfield, Caseros y La Plata hasta llegar al Riachuelo. Además, los efectivos de la comisaría 42, junto con los de la seccional 28, custodiarán la caravana prevista de hinchas de Huracán, quienes deberán trasladarse por las avenidas Roca y Varela y las calles Fructuoso Rivera y Ana María Janner hasta desembocar en el Nuevo Gasómetro. Por último, el comisario Robles aconsejó al público que concurra temprano al estadio sin rostros pintados, banderas que excedan el largo permitido (dos metros por uno), pirotecnia, emblemas que no correspondan a su equipo ni elementos punzantes.
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