Liliana Herrero, quien cantó junto a Mercedes Sosa en Santa Catalina, dialogó con Escenario, aún conmovida por la emoción que la embargaba tras la fuerte experiencia artística que vivió. La entrerriana destacó que su presentación constituyó uno de los momentos más emocionantes de su carrera. "Creo que a la misma Mercedes le pasó algo parecido ya que, como la acompañé durante toda la tarde, soy testigo de que no podía contener las lágrimas ante el fervor y la humildad de los homenajes que el pueblo de Santa Catalina le tributó", reveló. Herrero agregó: "Los recitales en lugares como este deben servir para a la reflexión de los argentinos. Este pueblo es un símbolo de la opresión y de la pobreza de América, porque no hay que olvidar que aquí suceden cosas como que hay una sola línea telefónica o que no existe prácticamente el agua corriente y que esta es una zona que puede inadvertidamente ser vista como algo pintoresco, cuando estamos hablando de un sitio donde, entre otras cosas, existen infinidad de enfermos chagásicos por los ranchos con techos de paja y adobe sin pintar".
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