La renuncia de José Luis Machinea no sorprendió a nadie. El desgaste de su figura luego de que se apagaran las expectativas que generó el blindaje terminó por dejarlo sin oxígeno. De todas maneras, la salida del ministro sorprendió al gobierno sin un reemplazante. La pregunta, entonces, fue ¿qué precipitó la decisión? La respuesta dada ayer por De la Rúa no dejó de ser curiosa. Dijo que Machinea se fue por las "muchas preguntas de la prensa" y por la erosión de la "confianza" sobre su gestión. "Había muchas preguntas de la prensa; reiteraban cada tanto cuándo se iba, y eso también produce un agotamiento en la confianza, en la disposición de trabajo". Luego añadió que "la economía siempre tiene múltiples problemas que deben haber influido en su decisión, pero sobre todo ese factor: confianza, me parece que ha influido en su ánimo". De la Rúa negó que algún conflicto con su ministro haya sido la causa de su alejamiento, e insistió: "La economía funciona también en base a la confianza, y los reiterados planteos o rumores han incidido sobre su decisión".
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La Ciudad
