La Fifa no afloja con su dureza

El presidente de la Fifa, el suizo Joseph Blatter, aseguró que el fútbol no podrá "disculpar a los jugadores" en el caso de los pasaportes falsos en poder de extranjeros, "porque son mayores y saben muy bien lo que hacen".
En declaraciones a la prensa francesa, Blatter expresó: "Esconderse detrás de los representantes o de los clubes, no es serio; los jugadores deben saber qué es lo que pasa con su documentación".
El dirigente se mostró partidario de aplicar a los jugadores involucrados "sanciones ejemplificadoras", como también a los representantes que figuran como "agentes de Fifa".
Respecto del caso de los pasaportes falsos, Blatter afirmó: "Es uno de los temas más desagradables que me he encontrado. Trataremos este asunto en la próxima reunión ejecutiva de la Fifa, pero debemos esperar los dictámenes de la Justicia ordinaria e intervenir desde las federaciones".
El clima tenso con los responsables de estas maniobras parece haber llegado a España, y el secretario de Estado para el Deporte, Juan Gómez Angulo, garantizó que se actuará con "mano dura".
Gómez Angulo declaró en Barcelona que "las federaciones que detecten casos de fraude tienen todo el apoyo del Consejo Superior del Deporte, para actuar con contundencia".
Hoy finaliza el plazo dado por la Federación Española, para la presentación de documentación por parte de los clubes que cuentan con casos sospechosos.

Bartelt sigue en la mira
El fiscal romano Silverio Piro, que investiga el caso del pasaporte falso de Verón (Lazio), insiste en estudiar el documento obtenido por otro argentino que jugó en la Roma: Gustavo Bartelt, actualmente en el Rayo Vallecano.
A pesar de que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia, a través de su subsecretario Franco Danieli, que investigó los antecedentes del pasaporte de Bartelt, dijo que ese documento fue bien tramitado, Piro insiste en que el caso guarda semejanzas con el de Verón.
El caso no traería aparejado una superposición de jurisdicciones porque en Italia queda bien en claro que "la última palabra la tiene la Justicia".