Cuatro policías resultaron heridos ayer, y uno de ellos sufrió la amputación de un dedo de la mano, por la explosión de un petardo arrojado por hinchas de Vicenza, en el partido que su equipo igualó con Atalanta en esta ciudad. Uno de los inspectores afectados por la explosión, además de perder parte de un dedo de su mano derecha, tiene también varios dañados, por lo que en las próximas horas podría amputársele otro. El policía fue herido cuando intentaba agarrar el petardo, en un intento de evitar que la explosión afectara a los aficionados que se encontraban cerca del lugar. Uno de los efectivos que estaban en el lugar resultó herido en una pierna y otros dos sufrieron traumatismos auditivos, según informaron funcionarios policiales. El presidente de la Unión de la Policía, Luigi Ferone, afirmó que "mientras hay futbolistas que ganan billones de liras, un inspector perdió un dedo en una mano en un gesto noble y cumpliendo con su deber por sólo unos cuantos miles de liras". Un seguidor de Vicenza, Aldo Pertile, fue acusado por este incidente, mientras que otros cinco aficionados del equipo visitante también fueron detenidos por la policía en los alrededores del estadio al término del encuentro.
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