Honolulu. -Con la cabeza gacha y los ojos llenos de lágrimas, el capitán del pesquero escuela japonés describió los minutos aterradores luego de que un submarino nuclear norteamericano chocó con su nave y lo hundió en las aguas frente a Hawai. "El barco se hundió sin ladearse", dijo Hisao Onishi, capitán del pesquero japonés Ehime Maru. "No tuvimos tiempo de sacar los botes salvavidas y caímos al mar".
En sus primeras declaraciones públicas desde el accidente, Onishi expresó su angustia por las nueve pe rsonas que siguen desaparecidas e incredulidad por el tiempo que llevó para que los 26 sobrevivientes fueran rescatados después del choque con el submarino nuclear USS Greeneville.
"Hicimos todo lo posible por hallar a los demás sobrevivientes", dijo Onishi. "No pudimos encontrar a los nueve desaparecidos".
Socorristas de la Cruz Roja continuaban la búsqueda de tres tripulantes, dos docentes y cuatro al umnos de la escuela secundaria de pesca de Uwajima, en el sudoeste de Japón.
Aún vestido con el mameluco azul que le dieron en la base de guardacostas después de su rescate, Onishi se presentó en una conferencia de prensa con Ietaka Horita, director de la escuela que envió a los profesores y estudiantes a realizar un viaje de entrenamiento en el bote.
Onishi relató cómo una expedición de pesca de rutina, con tiempo bueno, se convirtió en una tragedia cuando el submarino nuclear salió a la superficie bajo su bote.
"Hubo un ruido muy fuerte y un impulso que alzó nuestra popa", dijo Onishi. "No vi otros buques en la zona y miré a mi alrededor, pensando que habíamos chocado con algún objeto flotante".
¿Entrenamiento o promoción?
El submarino realizaba una misión de entrenamiento cuando salió a la superficie y hundió al Ehime Maru. Otras fuentes dicen que llevaba a empresarios norteamericanos en un viaje de exhibición.
El Greeneville, que sufrió algunos daños superficiales, volvió a su base en Pearl Harbour. La Armada está investigando las causas del choque.
Los familiares de las víctimas de la colisión se disponían a viajar desde Japón a Honolulu, aunque la esperanza de hallar vivos a nueve desaparecidos son mínimas.
El premier siguió con el golf
El primer ministro de Japón, Yoshiro Mori, fue blanco de las críticas de los políticos y la prensa, por continuar un partido de golf después de haberse enterado que el submarino nuclear estadounidense chocó y hundió al barco escuela japonés.
"No sé cómo el primer ministro se enteró, pero creo que debería haber dejado de jugar golf de inmediato y haber regresado a su despacho", dijo Takenori Kanzaki, líder del partido Nuevo Komeito y socio clave en la coalición gobernante de Mori.
Los principales diarios publicaron en su mayoría artículos y editoriales en la primera plana, con críticas al primer ministro más impopular de Japón en muchos años por su decisión de terminar una ronda de golf el sábado en la mañana, después de haber escuchado la noticia de que el barco japonés se había hundido cerca de Hawai.
Capitán removido
El capitán del submarino USS Greenville fue apartado de su puesto, informó la agencia de noticias japonesa Kyodo News, que cita a la flota estadounidense del Pacífico. Scott Waddle era el oficial al mando del submarino en el momento del accidente. Por su parte, Japón ha solicitado a Estados Unidos que reflote el buque. Este se encuentra ahora en el fondo del mar, a 550 metros de la superficie, para rescatar los cuerpos de los desaparecidos, que presumiblemente quedaron atrapados en el buque.