A Tiro Federal le amargaron la tarde al final

El equipo de barrio Ludueña se descuidó en los últimos minutos y empató 1 a 1 con Ñuñorco

Cualquier persona que hubiese ingresado al vestuario de Tiro Federal al término del encuentro hubiese dicho que el equipo rosarino había sufrido una derrota. El silencio local fue el reflejo más elocuente de que el resultado del partido no los había convencido. El 1 a 1 frente a Ñuñorco fue un cachetazo demasiado duro para un Tiro Federal que debió haberse quedado con los tres puntos.
Para la irregular campaña tirolense, el partido de ayer fue una cuota importante de aliento, más que nada porque los dirigidos por Abratti-Della Riva supieron calzarse el traje de protagonista ante uno de los equipos más parejos del torneo. A Tiro no le pesó la responsabilidad de marcar el camino del partido. Hernández se movía con facilidad a espaldas de Vallejo, Olsina aportaba lo suyo por izquierda, mientras que Banduine, lentamente, se iba transformando en el dolor de cabeza más grande de la defensa tucumana.
Así las cosas, los rosarinos dispusieron de algunas chances claras, las que fueron increíblemente desperdiciadas. Banduine lo tuvo en un par de ocasiones -una de ellas pegó en el palo-, pero la falta de puntería lo privaba de pegar el primer grito de la tarde.
Tiro iba hasta el cansancio, pero todo era en vano. Los goles no llegaban. A los 41' Olsina dispuso de una de las más claras tras una perfecta asistencia del chaqueño Aibes, pero su remate se fue lamiendo el poste. Hasta que a los 45' llegó la clara infracción de Contreras sobre Banduine, que Hernández se encargó de no desaprovechar. El 1 a 0, más que tranquilidad, otorgaba un manto de justicia.
En el segundo tiempo Tiro debió haber definido antes el encuentro. Y chances no le faltaron. Felichichi lo tuvo a los 8' tras capturar un córner de Hernández, y el propio Hernández a los 30 ejecutó un córner olímpico, pero en ambas oportunidades los palos se volvían a burlar de la suerte tirolense.
Quedaba claro que si no podía convertir había que cuidar el cero, pero Tiro tampoco lo pudo hacer. En uno de los pocos descuidos de la defensa, González se escapó por derecha y el centro al corazón del área encontró a Chávez, quien sólo tuvo que empujarla.
El castigo fue demasiado duro. Tiro Federal fue claramente superior a Ñuñorco, pero su falta de claridad en los metros finales lo privó de una nueva victoria, la que más allá de servir desde lo anímico hubiese sido el resultado más acorde al desarrollo del juego.