El ex gobernador Eduardo Duhalde sumó ayer un ingrediente alarmante a sus habituales críticas al actual modelo económico que implementa la Alianza, al vaticinar que si no se modifica el rumbo se van a generar, seguramente, convulsiones sociales.
Duhalde se quejó de que el presidente Fernando de la Rúa en vez de cambiar (el modelo) lo profundiza, tras lo cual remató: Decir que este año va a ser espléndido (a partir del blindaje financiero) es tomarle el pelo a la gente.
El gobierno nacional obtuvo, en rigor, un poco de oxígeno con el respaldo financiero de casi 40.000 millones de dólares que se le brindó al país y el consecuente optimismo de los funcionarios de la Alianza no se hizo esperar.
El precandidato a senador nacional por el PJ advirtió, sin embargo, que estamos en una situación relativa peor que a fines del 99, cuando asumió la coalición UCR-Frepaso.
El peor de todos
El ex gobernador bonaerense volvió, además, a comparar el plan económico aliancista con el menemista, al que definió como el peor de los modelos ultraliberales (ver aparte).
Pronosticó, en esa línea, que esto va a generar, seguramente, convulsiones sociales que van a echar por tierra con todos estos malabarismos de tipo económico-financiero-economicista que quieren imponernos.
Duhalde también cuestionó que el anunciado incremento de la actividad económica beneficie a la gente, porque seguimos con un modelo de concentración económica, y puntualizó: Argentina no tiene un problema de falta de riqueza, tiene un problema de mala distribución de la riqueza.
Estimó que dentro de este orden económico, hay una variedad de modelos y nosotros hemos elegido el peor, porque es el ultraliberal. Vaya a colocar un banco a Chile, no puede; en Brasil se tarda años; y acá hemos abierto nuestra economía de par en par.
Aseguró, finalmente, que el gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, ha expresado muy claramente estas apreciaciones y, en esa sintonía, dijo que nosotros creemos que hay que pasar de un modelo de ajuste a un modelo de producción.