Austin, Texas. - El presidente electo George W. Bush designó ayer a un demócrata para su gabinete, escogiendo a Norman Mineta como secretario de Transporte tras ser secretario de Comercio en el gobierno actual. Bush concluyó la formación de su gabinete nombrando a Spencer Abraham, derrotado en su intento de reelegirse como senador por Michigan, como secretario de Energía; y Linda Chávez, quien dirigió la comisión de derechos civiles en el gobierno de Ronald Reagan, como secretaria de Trabajo. No puede haber otra mejor forma de comenzar el año nuevo que completando el gabinete, uno de los más sólidos que otro presidente haya podido armar, indicó Bush.
El republicano y sus asistentes están orgullosos de los esfuerzos en su selección del gabinete, especialmente debido al breve período de transición tras una lucha judicial sobre las elecciones presidenciales del 7 de noviembre. Le tomó cinco semanas al presidente Richard Nixon nombrar todos los secretarios de su gabinete, ocho semanas al presidente Jimmy Carter, 10 semanas al presidente Ronald Reagan, nueve semanas al presidente George Bush, y ocho semanas al presidente Bill Clinton, dijo el portavoz de la transición, Ari Fleischer.
Mineta, de 69 años, es un ex congresista demócrata por California, fue designado secretario de Comercio hace seis meses y se convirtió en el primer asiático que ocupa un cargo de gabinete. Mineta ratificó sus convicciones demócratas y señaló que durante la contienda entre Bush y el vicepresidente Al Gore orgullosamente le fui leal a mi partido. Pero resaltó que las elecciones son cosa del pasado y que lo que toca ahora es gobernar.
Abraham, de 48 años y de origen libanés, estuvo en el Senado un mandato y en noviembre perdió su intento de reelección. Chávez, que hasta ahora ejercía como la presidenta de un grupo privado en pro de los derechos en los puestos de trabajo, y hace poco perdió en su intento por convertirse para ir al Senado en representación de Maryland.
Chávez se convierte en la cuarta mujer en el equipo del mandatario y la segunda de la minoría hispana. El primer hispano en ser nombrado para el futuro equipo de gobierno de Bush fue Mel Martínez, un cubano americano, para el puesto de Vivienda. Bush ha cumplido su promesa de diversidad en cuanto a raza y género, al nominar a dos personas de raza negra, un cubano estadounidense y cuatro mujeres a su gabinete. Con un gabinete formado con 13 republicanos y un demócrata, a Bush solamente le falta por designar dos cargos más de relevancia: el de director de la CIA y el embajador ante la ONU.
Primeros roces
En tanto, varios grupos de derechos civiles que se oponen a la designación de John Ashcroft al frente del Departamento de Justicia pidieron a los senadores del Partido Demócrata votar en contra de la postulación del republicano. Los grupos se sumarán a organizaciones sindicales en procura de un voto negativo a la confirmación del ex senador republicano, declaró el activista de los derechos civiles Jesse Jackson. La campaña también tratará de descarrilar la confirmación de la gobernadora de Nueva Jersey Christie Whitman, escogida por el presidente electo George W. Bush para el mando de la política ambiental.
Ashcroft ha generado recelo y oposición debido a sus opiniones contra el aborto y la campaña que montó en contra de la postulación de un abogado negro como juez de un tribunal federal. Whitman, en tanto, ha sido el blanco de la ira debido a las denuncias de abusos y discriminación de la policía en Nueva Jersey hacia ciudadanos negros. Además fue el centro de la polémica el año pasado cuando se difundió una fotografía en la que se le muestra cateando a un joven negro.
Jackson enfatizó que los senadores demócratas serán presionados en cada acto público posible. Según Jackson, los senadores demócratas no deben sacar a relucir la lealtad a un ex compañero suyo, sino mostrar apoyo a la causa de los derechos civiles y la justicia social.
Duro interrogatorio
En tanto, el líder de la minoría demócrata en el Senado Tom Daschle expresó ayer voluntad de someter a Ashcroft a un duro cuestionario en las audiencias de confirmación.
Ashcroft es un ex senador republicano de Misurí, que sucumbió en su intento de reelección ante el extinto gobernador demócrata Mel Carnahan. El nombre de Carnahan permaneció en la lista, a pesar de su muerte en un accidente de aviación semanas antes. La viuda de éste, Jean, fue designada para el cargo.
Los antecedentes históricos en el Senado indican que Ashcroft no deberían tener ningún problema en ser ratificado, pero las declaraciones de Jackson apuntan a socavar la tradición.
La Ciudad
