Santiago. - El triunfo legal logrado por el general retirado Augusto Pinochet en la Corte Suprema de Justicia podría convertirse en un bumerán que lo lleve a ser enjuiciado nuevamente por secuestros y asesinatos, porque el juez que lo investiga fijó ayer las fechas para su interrogatorio y sus exámenes mentales. La Corte Suprema anuló el miércoles el procesamiento de Pinochet por las 73 ejecuciones cometidas por la Caravana de la Muerte, un grupo de tareas enviado por él al norte chileno para supuestamente agilizar los juicios contra sus opositores en 1973. Pero junto con acoger el recurso, ordenó al juez Juan Guzmán interrogar a Pinochet en un plazo de 20 días, se hayan o no realizado los exámenes médicos. Guzmán, que investiga 190 querellas criminales contra el ex dictador, reaccionó rápidamente y anunció que lo interrogará el próximo miércoles y que debe ser examinado el 22 de enero. Técnicamente, una vez efectuado el interrogatorio, Guzmán puede procesarlo de nuevo por los mismos cargos: 18 secuestros y 55 homicidios, anulados en la víspera por el máximo tribunal. El magistrado le otorgó tres días a Pinochet para que fije su residencia, adonde acudirá interrogarlo. El ex dictador tiene la garantía de ser indagado en su casa porque es un general retirado, un ex presidente y un ex senador vitalicio. El primero de diciembre Guzmán le abrió juicio por su coautoría de 18 secuestros y 55 homicidios cometidos por la Caravana de la Muerte, pero su decisión fue anulada por la Corte de Apelaciones y por la Corte Suprema porque no aceptó convalidar un exhorto por el interrogatorio. La ley chilena obliga a los exámenes psiquiátricos a los mayores de 70 años y a quienes arriesguen altas condenas de prisión. Los locos o dementes son eximidos judicialmente. Los querellantes deseaban que Pinochet fuese primero interrogado y luego examinado porque Guzmán podrá ordenar nuevamente que sea procesado, fichado y detenido en su domicilio. Los expertos han señalado que se requieren unos cinco días para las pericias y al menos un par de semanas para elaborar su decisivo informe. Pinochet sufre de una avanzada diabetes, porta un marcapasos, tiene artrosis en una rodilla y tuvo un par de micro derrames cerebrales.
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