El ex dictador chileno Augusto Pinochet ingresó ayer por la mañana en el Hospital Militar de Santiago debido a una descompensación de la presión arterial, informaron fuentes cercanas al ex jefe del ejército. Será sometido a un chequeo de tipo cardíaco, manifestó el vocero del ex dictador, Guillermo Garín y sin dar demasiadas precisiones explicó que no se trata de una revisación rutinaria. Este hecho ocurrió apenas un día después que la Corte Suprema confirmara la anulación de su procesamiento aunque autorizó al juez Juan Guzmán Tapia a someterlo a un interrogatorio en el plazo de los próximos 20 días. El Hospital Militar de Santiago es, precisamente, el lugar designado por los tribunales para someter a un chequeo médico al general retirado para determinar si está en condiciones mentales de afrontar un juicio. Según allegados del ex dictador, Pinochet, de 85 años, se sintió mal durante la mañana, por lo cual su equipo médico le recomendó el traslado al recinto médico castrense para someterse a un chequeo. También se informó que esta situación obligó a Pinochet a suspender una visita de dirigentes de la ultraconservadora Unión Demócrata Independiente (UDI) para expresarle su apoyo y solidaridad.
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