Dicen que los manuales existen con el solo fin de transgredirlos. En el Gran Manual del Periodismo hay dos órdenes fundacionales que todo profesional debe sino cumplir por lo menos respetar. La primera dice que no se debe escribir en primera persona y la segunda que el periodista nunca es el foco de la noticia. Cumplo en respetar a ambas pero también voy a transgredirlas. Jorge Halperín es uno de los periodistas más reconocidos de la Argentina, trabajó en La Razón, El Cronista Comercial y Clarín, y hoy es el director de la revista Tres Puntos. Pero para los comunicadores sociales Halperín es mucho más que eso. Entre otros libros de su autoría, La entrevista periodística (1995) es algo así como la Biblia en los talleres de redacción periodística. Fue por eso que ponerse delante del Gran Entrevistador le pone a uno piel de gallina y lo coloca en el compromiso de la excelencia periodística. Pero nada es casual: ni la obra de un periodista que al organizar sus conocimientos genera otra libro de consulta obligada ni el placer del discípulo a la hora de poner al maestro delante del grabador. Por lo demás, mil perdones.
O.V.
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La Ciudad
