Crece la tensión entre gobierno y oposición en Pakistán

Islamabad.- El partido de la principal líder opositora paquistaní, Benazir Bhutto, advirtió hoy de “batallas campales” si no se permite una gran marcha contra el estado de sitio prevista para mañana, en medio de señales de que las autoridades se preparaban a prohibir la manifestación.

Funcionarios y jefes de policía tenían agendado reunirse para considerar emitir una prohibición específica de la marcha que Bhutto quiere encabezar desde la ciudad de Lahore hacia la capital Islamabad, para exigir al presidente, general Pervez Musharraf, que levante el estado de sitio.

El ministro de Justicia de la provincia de Punjab, donde están Lahore e Islamabad, dijo que las manifestaciones no estaban permitidas bajo las medidas de excepción vigentes hace nueve días.

La policía volvió a citar el alto riesgo de un atentado islamista contra la marcha como la razón central para impedirla, el mismo argumento por el cual puso bajo arresto domiciliario a Bhutto el viernes pasado y le impidió liderar otra manifestación.

“Sabemos que la amenaza de un ataque es muy seria. Es inminente y es del mayor nivel”, dijo el jefe de policía de Lahore, Malik Mohammad Iqbal, citado por la agencia DPA.

Al menos 145 personas murieron el mes pasado en un doble atentado suicida contra la caravana de cientos de miles de seguidores de Bhutto que salieron a darle la bienvenida a la dirigente a su regreso al país tras ocho años en el exilio.

Bhutto fue saludada hoy con vítores y signos de la victoria cuando su convoy de varios autos recorrió Lahore en medio de grandes medidas de seguridad, y su Partido del Pueblo de Pakistán (PPP) advirtió de hechos de violencia si se pohíbe la marcha.

“Si la policía trata de frenarnos, habrá una batalla campal entre activistas del PPP y la policía en cada ciudad y cada barrio de Punjab”, dijo el vocero de la agrupación, Farzana Raja.

Musharraf dijo ayer que el país celebrará sus elecciones parlamentarias en enero como estaba previsto, pero no puso fecha para levantar el estado de sitio, bajo el cual se detuvo a más de 2.000 opositores, se prohibieron las marchas y se limitaron las transmisiones de los canales de televisión no estatales.

Bhutto calificó de positiva la convocatoria a las urnas el 9 de enero, pero añadió que será difícil hacer campaña y celebrar elecciones bajo el estado de excepción. (Télam)