Sancho renunció a la Gobernación de Santa Cruz

El gobernador de la provincia de Santa Cruz, Carlos Sancho, presentó su renuncia al cargo luego de los serios incidentes registrados en los últimos días, y fundamentalmente ayer, y será sucedido en el cargo por un hombre de confianza del presidente Néstor Kirchner, Daniel Peralta.

Sancho, quien ejerció durante trece meses la Gobernación, acusó “problemas de salud” para renunciar al cargo, al que llegó de la mano de su amigo, el presidente Néstor Kirchner.

Quien ocupará su lugar al frente de la provincia, Peralta, es otro dirigente kirchnerista al que venció en la interna del Frente para la Victoria para acompañar a Sergio Acevedo en la fórmula gubernamental que ganó las elecciones en 2003, con el 72 por ciento de los votos.

El renunciante mandatario era un empresario inmobiliario hasta que Kirchner lo impulsó a la carrera política que inició como concejal en 1999.

Sancho, de 44 años, integra una tradicional familia de comerciantes de Río Gallegos.

En 1999, asumió como concejal de la capital provincial y en 2002 alcanzó la presidencia del cuerpo cuando el intendente kirchnerista Héctor Aburto debió renunciar y lo sucedió el titular de la legislatura local.

Un año más tarde, le ganó a Peralta la pelea interna del Frente para la Victoria para acompañar a Acevedo, el candidato designado por el entonces presidenciable Kirchner para sucederlo en el gobierno provincial.

Sancho se desempeñó como presidente de la Cámara de Diputados provincial a la sombra de Acevedo, hasta que en marzo de 2006 el gobernador renunció en medio de las protestas por el crimen del policía Jorge Sayago, ocurrido en Las Heras, y él asumió en su lugar.

Considerado políticamente más cercano a Cristina Fernández que a Néstor Kirchner, Sancho presentó su renuncia, acosado por críticas del entorno presidencial por el manejo de esa crisis, y desapareció en el anonimato de su pueblo natal, Pico Truncado.

Meses atrás, una enfermedad sobre la que nunca se dieron precisiones en forma oficial, obligó a Sancho a alejarse de su cargo y ser internado en una clínica privada de Buenos Aires.

Sancho recién salió ayer a hablar ante la prensa local pese a que la crisis en la provincia lleva más de un mes.

Los sindicatos, que jamás fueron invitados a dialogar, lo acusaron de “estar pintado” e interpretaron que la provincia era comandada desde Buenos Aires. (DyN)

El ahora ex gobernador santacruceño.