El crucero que encalló en la antártida derrama combustible

Buenos Aires.- El crucero Nordkapp, que encalló el martes en el noroeste de la Península Antártica, derramó combustible en la Isla Decepción -un área natural protegida con importantes colonias de animales marinos- y generó una mancha en el mar que según fuentes españolas llegaría a los 5 kilómetros de extensión.

Mariano Mémoli, Director Nacional del Antártico, confirmó el reporte de la base española Gabriel de Castilla, cuyos científicos observaron esta mañana “trazas de hidrocarburos” a lo largo de cinco kilómetros de la costa de la bahía interior de la isla, que forma parte del archipiélago de las Shetland.

El fuel oil también fue detectado por el personal de la base argentina Isla Decepción, que se encuentra a un kilómetro y medio de la Gabriel de Castilla, con cuyos científicos suelen trabajar en conjunto, ya que son los dos únicos asentamientos del área.

Los argentinos y españoles comenzaron a analizar hoy las manchas que llegaron a la costa y a diseñar las tareas para la limpieza del lugar, según informó Mémoli, quien se mostró preocupado por el derrame, que podría afectar a la flora y fauna del lugar, al cual calificó como “una región prístina”.

En Isla Decepción hay dos importantes colonias de pingüinos que, según los expertos, se encuentran entre las más pobladas del área. En las costas se pueden observar miles de pingüinos “barbijo” (con una franja negra bajo la cabeza) y “papúa” (con un característico pico rojo).

Allí también viven gaviotas, cormoranes y lobos marinos.

La Armada de Chile, por su parte, comunicó que hay dos buques de esa bandera -un rompehielos y un remolcador- cerca de la isla, aunque hasta esta tarde el mal clima les había impedido entrar a la bahía en donde el crucero noruego volcó el fuel oil a través de una vía que se abrió en su casco cuando golpeó una roca.

El rompehielos Viel y el remolcador Leucotón cuentan con los elementos para aislar la mancha que flota sobre el agua, indicó Jorge Bastías Videla, vocero de la Armada de Chile.

El procedimiento habitual en estos casos consite en rodear la mancha con flotadores para impedir que se expanda, y luego absorber el combustible de la superficie con bombas.

Según señaló la propietaria del crucero, la noruega Hurtigruten, el Nordkapp navegó anoche hacia la Isla San Jorge -también parte de las Shetland- con la asistencia del buque militar británico Endurance, que le había prestado ayuda ayer con buzos que verificaron los daños en el casco.

La empresa no precisó si el barco sigue perdiendo combustible, aunque reconoció que por “consideraciones ambientales”, será revisado en San Jorge y luego llevado a un astillero en tierra firme.

Los 294 pasajeros del Nordkapp fueron transferidos al Nordnorge, otro crucero de la misma empresa, y viajan hacia Ushuaia, donde desembarcarán mañana.

En sus comunicados oficiales, Hurtigruten, negó que hubiera derrames, aunque fuentes chilenas aseguraron a Télam que desde ese barco les habían informado de una pérdida, lo cual fue confirmado por los testimonios de las bases argentina y española.

Mémoli también indicó que aún no hay posibilidades de medir con exactitud la importancia del derrame, porque el temporal en la isla impidió realizar avistajes aéreos.

De todos modos, las bases argentina y españolas están realizando las mediciones de contaminación en tierra y el buque militar español Las Palmas tomó muestras ayer y hoy en el agua, con las que se podría evaluar el impacto de la mancha en la zona.

El crucero Nordkapp tocó una roca el martes a las 14.30 en cercanías de la Isla Decepción, en una zona conocida como los Fuelles de Neptuno, considerada muy peligrosa por los navegantes.

Como indicador de los peligros que acarrea navegar en esa zona, una fuente naviera argentina afirmó que el rompehielos argentino Irizar evita acercarse a ese accidente geográfico. (Télam)