El gobernador envía el proyecto para crear la empresa provincial de agua

Es una versión modificada de la iniciativa que contemplaba la creación de un ente y un fondo fiduciario

El gobernador Jorge Obeid anunció finalmente anoche que enviará a la Legislatura el proyecto de ley para conformar una empresa provincial de servicio de agua. La iniciativa retoma con algunas modificaciones la idea lanzada hace algunos meses por el propio mandatario de crear un ente para la prestación del servicio de agua potable y la realización de las obras de expansión de aguas y cloacas a financiarse con un fondo fiduciario.

El anuncio que realizó ayer Obeid en la Casa Rosada luego de participar de la adjudicación de viviendas para la provincia en el marco del Plan Federal, coronó un día de alta tensión en torno de la conflictiva relación creada por el inminente retiro de Aguas Provinciales de Santa Fe de la concesión del servicio de agua potable.

Si bien el mandatario santafesino aseguró que el gobierno "sigue proclive al diálogo" con la compañía, admitió que "si se cayera la concesión se abriría la posibilidad" de que el Estado provincial se hiciera cargo del servicio.

La rescisión del contrato entre el gobierno santafesino y Aguas Provinciales es casi un hecho. El lunes próximo vence el plazo impuesto por la empresa para que el gobierno formule una propuesta de negociación que garantice la "ecuación económico-financiera" de la concesión, la cual será contestada por un dictamen de la Fiscalía del Estado rechazando la responsabilidad del Estado en el actual conflicto.

Pese a la casi asegurada retirada de la compañía, el gobierno intenta negociar una "transición ordenada". El ministro de Obras y Servicios Públicos, Alberto Hammerly, aseguró ayer que ese período de "convivencia" podría extenderse por dos años, si se atiene a lo estipulado en el contrato. Aunque suena como un imposible, esa afirmación da cuenta del intento del ministro por asegurarse una salida con alfombra roja, de modo de evitar eventuales juicios.

"Por contrato la empresa no tiene la posibilidad de abandonar la prestación del servicio de un día para otro. Está previsto que la transición puede durar hasta dos años", explicó el Hammerly quien aclaró que "todo dependerá de qué se acuerde con la empresa". En Aguas Provinciales evitaron hacer declaraciones y optaron por "esperar los hechos", aunque de todos modos consideraron poco probable una transición semejante. En cambio, no se descarta una transición de algunos pocos meses.

Por lo pronto, el gobernador Jorge Obeid sigue estudiando el día después. Está prácticamente en sesión permanente con Hammerly y el ministro de Asuntos Hídricos, Alberto Joaquín. En los encuentros no sólo se analizaron las opciones de administración ante la retirada de Aguas, sino también en manos de qué funcionario quedará la responsabilidad.

De todos modos, desde la provincia aseguran que el servicio estará garantizado. "De un día para otro no nos vamos a quedar sin agua, eso lo garantiza la provincia", dijo Hammerly. El funcionario adelantó que la Fiscalía de Estado rechazará los términos de la nota enviada por la empresa en la cual responsabiliza al concendente (el Estado provincial) por la eventual rescisión del contrato y, al relativizar la posibilidad de juicios contra la provincia, aclaró que "si no hay acuerdo, la provincia tiene mucho para reclamarle a la empresa porque ellos tienen la obligación de garantizar un servicio relacionado con la salud y el medio ambiente".

El dirigente de la Asamblea Provincial por el Derecho al Agua, Alberto Muñoz, señaló ayer que cuando se habla de las acreencias "existe una falsa discusión". Al respecto explicó que "los acreedores son el Estado y los usuarios, y esto se puede comprobar con sólo analizar cuánto gastó la Municipalidad en salud pública porque no se hicieron las cloacas". El dirigente explicó que con el aumento del 13,85% que el gobierno autorizó en abril del 99, la empresa "recaudó 28 millones de pesos que tenían que ir a obras que luego no se realizaron". Además, explicó que según el informe del Ente Regulador del Servicio Sanitario (Enress), en los últimos cuatro años Aguas dejó de invertir 60 millones de pesos".


Los escenarios posibles
Frente a la inminencia del día D, el gobernador reiteró en los últimos días los escenarios para el futuro de la concesión: volver a licitar el servicio con nuevos pliegos, municipalizarlo o provincializarlo con alguna fórmula alternativa bajo la cual se le podría dar una participación a las cooperativas, muchas de las cuales ya prestan el servicio de aguas exitosamente en muchas localidades de Santa Fe.

El proyecto para crear la empresa provincial de servicio de agua parece marcar el rumbo de la provincialización pero no se descarta que la figura del nuevo ente sea la plataforma para explorar otras soluciones. El presidente de la Confederación de Cooperativas de la Argentina (Cooperar), Juan Carlos Fissore, señaló ayer que el gobernador interesó a las cooperativas que prestan el servicio de agua en distintas localidades de la provincia a sumarse a un nuevo esquema de gestión. "Estamos dispuesto a acompañar el proyecto en el marco de un sistema mixto, donde participen las cooperativas y también con inversiones de los propios ciudadanos, con participaciones individuales en la compañía", dijo.

La municipalización impulsada con peros por el intendente de Rosario Miguel Lifschitz entró en cambio en un terreno nebuloso. El jefe municipal avanzó ayer en su idea al asegurar que está diseñando "un proyecto alternativo para solicitar la municipalización del servicio a través de un organismo metropolitano", que incluya a las localidades vecinas. La principal traba es conseguir los fondos para las obras pendientes. El director de la subsecretaría de Obras Públicas de la Municipalidad, Hugo Orsollini, explicó que la Municipalidad está en condiciones de hacerse cargo de una transición de diez o doce meses. En cambio, para pensar en un período más prolongado es necesario saber de dónde saldrá el dinero para las obras. La empresa Aguas valuó en 120 millones de pesos las inversiones que se necesitan para el centro rosarino. El secretario del sindicato de Obras Sanitarias, Oscar Barrionuevo, aseguró ayer en declaraciones radiales que los trabajadores del gremio prefieren la gestión privada. Al mismo tiempo, dijo que "el alejamiento de Aguas es algo armado" y que "no hubo incumplimientos".

Hammerly aseguró que por contrato la transición puede durar hasta dos años.