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 miércoles, 02 de marzo de 2005  
Menem y Saá responsabilizaron al gobierno por la derrota santiagueña

Los ex presidentes Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saá señalaron ayer al "gobierno nacional" como el "causante directo" de la derrota del justicialismo en las elecciones de gobernador en Santiago del Estero, y agregaron que "esta tiene que ser la última vez que el peronismo se derrota a sí mismo".

"El causante directo (de la derrota) es el gobierno nacional, que impulsó la intervención federal en Santiago del Estero, violentando el sistema democrático, sin tener en cuenta que las dificultades de la democracia sólo pueden resolverse con más democracia", señalaron ayer Menem y Rodríguez Saá en un comunicado de prensa.

Además, los ex presidentes sindicaron como otros responsables a "quienes decidieron la intervención del Partido Justicialista provincial y provocaron su anarquización".

En 1991, durante la presidencia de Carlos Menem, un caso parecido sucedió en la provincia de Catamarca, cuando tras el asesinato de la estudiante María Soledad Morales la provincia fue intervenida y el peronismo perdió por primera vez en muchos años la gobernación de la provincia, en manos del radical Arnoldo Castillo.

"El fiasco electoral del peronismo en Santiago del Estero nos deja enseñanzas. La primera es que el empleo masivo de los recursos económicos remitidos por el gobierno nacional, especulando electoralmente con el hambre y la miseria del pueblo, no fue -nunca lo es- suficiente para volcar un resultado electoral", agregaron los ex mandatarios.

Menem y Rodríguez Saá aseguraron que "los santiagueños acaban de confirmar que, en la Argentina socialmente dignificada por Perón y por Eva Perón, el voto, aunque se pretenda comprar, no se vende. La segunda lección es que la actitud oportunista de algunos dirigentes que pretenden beneficiarse electoralmente con el calor oficial, lejos de favorecerlos, los alejan del pueblo al que pretenden representar".

"Lo ocurrido en Santiago del Estero ratifica que la ausencia de una conducción política que sea legítima y legal, surgida de la voluntad de todos los peronistas, hace que nos encontremos con falta de liderazgos adecuados y con la proliferación de intervenciones que no son respetables ni respetadas, cuya existencia sólo contribuye a la división del peronismo", concluyeron.
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