Hallaron trotyl en la cárcel de Villa Devoto

Eran dos panes de explosivos sin detonador. Investigan si hubo connivencia de los guardiacárceles

Buenos Aires.- Cerca de un kilo de trotyl fue hallado en un patio interno del penal porteño de Villa Devoto donde se cree que fue dejado por presos y se investiga si existió connivencia del personal penitenciario para ingresar el explosivo a la prisión.

A raíz del hallazgo se inició una causa en la Justicia Federal y una investigación disciplinaria y administrativa por la responsabilidad objetiva que le puede caber al personal penitenciario de la Unidad 2 del Servicio Penitenciario Federal, informaron fuentes del ministerio de Justicia nacional.

El hallazgo, que recién fue dado a conocer ayer, ocurrió el 20 de septiembre pasado cuando se encontraron dos panes de trotyl de dos libras de peso adentro de una bolsa de compras que había sido dejada detrás de un arbusto del patio interno lindante a la planta número 1 del penal.

La primera hipótesis que surgió en el marco de la pesquisa es que el explosivo podía llegar a ser utilizado para un intento de fuga por parte de los presos más peligrosos alojados en esa unidad.

Según algunas fuentes consultadas, el explosivo fue descubierto durante una requisa de rutina realizada por los penitenciarios, que incluso fueron atacados con piedras por los detenidos cuando descubrieron el explosivo.

No obstante, otros voceros consultados dijeron que el hallazgo se produjo cuando los presos se "descartaron" del material creyendo que habían sido descubiertos al advertir la llegada al penal de una brigada de Gendarmería Nacional, que en realidad había ido a retirar material explosivo obsoleto del SPF.

Las fuentes informaron que en la bolsa se hallaron dos panes de trotyl, por casi un kilo, aunque no se encontraron detonadores. Un experto en explosivos dijo que esa cantidad de explosivo basta para destruir una puerta o realizar un hueco en una pared.

Ahora la investigación apunta a determinar qué destino iba a darse a ese material y cómo fue ingresado al penal, y por eso se evalúa la actuación del personal penitenciario.

El caso, que está bajo secreto de sumario, es investigado por el juez federal Claudio Bonadío y el fiscal Carlos Rívolo. En tanto las fuentes del ministerio de Justicia de la Nación dijeron que la cartera "facilitó la investigación judicial acompañando informes y documentos y puso a disposición de la investigación a las más altas autoridades del SPF".

Mientras tanto, a nivel interno, se inició un sumario administrativo por la responsabilidad de los penitenciarios a cargo de la seguridad del penal.

En tanto, a raíz del episodio, se ordenó un refuerzo en el control de ingreso al penal y hasta se le prohibió a los profesionales que asisten diariamente a realizar distintas tareas en la cárcel que no ingresen alimentos. (Télam)